A pocos días de la fiesta de La Mochila, los ciudadanos de Ceuta comienzan a hacer acopio de los típicos frutos secos. Y, aunque en los supermercados es fácil adquirirlos, la verdadera magia reside en comprar las pequeñas bolsas que preparan, todavía, algunos puestos de la ciudad. Una tradición que, lamentablemente, cada año va a menos, pero que aún mantienen ciertas personas como Hassan Mohamed, quien, con la ilusión intacta, dedica, estos días, una parte de su famoso quiosco en Los Rosales a vender paquetes de frutos secos creados, expresamente, para celebrar La Mochila.
A pesar de no encontrarse muy bien de salud, Hassan ha querido seguir con la tradición y, aunque no ha podido montar su popular puesto de castañas, el rincón dedicado a la mochila sigue en pie, recibiendo la visita de niños y mayores cada tarde.
A 0,80 el paquete, la variedad es amplia: pipas de calabaza, almendras, nueces, anacardos…, al gusto del consumidor las prepara Hassan sentado en una banqueta detrás del quiosco. “La gente me conoce porque llevo aquí 25 años y no puedo poner las bolsas muy caras, por eso voy viendo y, si son almendras que cuestan más dinero, echo menos y, si son pipas, relleno un poco más para que disfruten”, explica el vendedor.
Son muchos los ciudadanos de Ceuta que repiten el mismo discurso al preguntarles dónde encontrar puestos para comprar frutos secos para La Mochila: en Los Rosales está uno de los únicos que mantiene la costumbre. Quizás por ello, cada jornada reciba numerosas visitas, como la de Humaima González, que ya prepara el avituallamiento para subir al campo a festejar La Mochila con los suyos el próximo 1 de noviembre.
Una antiquísima tradición ceutí que cada año se celebra con el fin de compartir una buena jornada con amigos y familia comiendo frutos secos, productos de temporada y otras viandas. Y, aunque algunos aseguren que esta fiesta ha ido a menos y que se ha desvirtuado convirtiéndose en una excusa para el ‘botellón’, todavía quedan muchos ceutíes que la cumplen con rigor por ser parte del patrimonio de la cultura popular de su ciudad.
Me encanta, un aplauso para Hassan por mantener una tradición en nuestra tierra. Cuidate