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Rafael Ojeda participó en esta tradicional travesía, que contó con la presencia de más de 1.300 palistas
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El piragüista caballa terminó en el puesto 39 en veteranos
La tradicional travesía al Descenso del Sella, contó este año con la presencia de un palista ceutí. Se trata de Rafael Ojeda, que no ha querido perderse la oportunidad de participar en una prueba, con más de 1.300 palistas, llegados de los distinos puntos de España y de todo el Mundo.
La experiencia para el piragüista caballa ha sido muy positiva y ya no sólo por la posición que consiguió, sino también por lo que se vive en esta prueba.
En la salida, Ojeda tenía la posición 579 y al terminar el descenso estuvo en el puesto 351 de la clasificación general. Finalizó el 29 de su categoría de veteranos, pero demostró estar en plenas facultades para competir con el resto de rivales en pruebas tan complicadas como este Descenso.
El propio Ojeda habla de la prueba y señala que “podía haber quedado mejor. Sin embargo, en una de las batallas que se forman, me volcaron y perdí casi 15 minutos en llegar a la orilla y volver a la competición. Aún así, seguí con la remontada y terminé en la vigesimonovena posición”.
El Descenso del Sella es una fiesta para Asturias y se demostró con la cantidad de participantes que se congregaron en la salida y también en la meta.
“Fuí a terminarla por cumplir una regata que todo piragüista debe haber realizado, al menos, una vez en la vida. Me fue bien y me quedo con la oportunidad de haber participado”, señala Ojeda.
El palista caballa continuará a partir de ahora, con sus entrenamientos diarios, pensando ya en la siguiente prueba a realizar.