Ceuta Ya! llevará al Pleno de enero una propuesta para instar a la Ciudad a “poner en marcha un Plan de Impulso y Sostenibilidad de las Tiendas de Barrio”, que contemple, al menos, cuatro iniciativas: la concesión de ayudas al alquiler o al pago de las cuotas de los préstamos hipotecarios; el pago de microcréditos de hasta 10.000 euros sin intereses; la puesta en marcha de descuentos específicos para quienes compren en ese tipo de negocios; y eximir a sus responsables “de todas las tasas e impuestos locales durante el primer año de actividad de las empresas de nueva implantación”.
Según han explicado en rueda de prensa el diputado localista Mohamed Mustafa y dos de los miembros de la Ejecutiva de la formación, Muad Ayadi y Ana García, Procesa podría encargarse tanto de la elaboración de las bases para la ejecución del Plan como de la habilitación de las partidas presupuestarias necesarias para su financiación mediante la reordenación de los créditos previstos en el actual presupuesto para potenciar el desarrollo económico.
Mustafa ha defendido que “lo que de manera coloquial llamamos también las 'tiendas de barrio' ha constituido desde siempre un valioso segmento de nuestro tejido productivo” y que “su aportación al conjunto de la riqueza, medido en términos de actividad y empleo, ha sido más que notable”.
Sin embargo, el sector, “otrora pujante”, se encuentra ahora “sumido en un prolongado declive”, tanto por el auge de las grandes superficies como por “la fuerte irrupción del comercio online, las compras en la península o, más recientemente, la disminución de la población y el cierre de la frontera”, que “han ido mermando paulatinamente esta modalidad de comercio provocando cierres y, sobre todo, actuando como factor disuasorio para emprender nuevos proyectos empresariales”.
Ceuta Ya! piensa que la ciudad “no puede permitirse el lujo de ver impasible cómo desaparecen todas las tiendas de nuestros barrios” porque un territorio en el que “es tan difícil encontrar e impulsar actividades económicas no puede resignarse a ver cómo se van cayendo las persianas una tras otra, arrastrando al paro a propietarios y trabajadores y arruinando las expectativas de emprendimiento de la juventud”.
Impacto negativo en la vida de las barriadas
El asunto tiene, además, más fondo, ya que para los localistas “no estamos ante un problema exclusivamente económico, pues el cierre de los comercios de proximidad tiene un impacto tremendamente negativo en la vida de las barriadas”.
“La alegría que generaba en las calles la actividad comercial ha dado paso a barrios que parecen parajes desiertos e inhóspitos, infundiendo tristeza y desánimo entre la población”, lamenta la propuesta, que aboga por que la administración se comprometa a impulsar el sector para que vuelva a “generar empleo, riqueza y calidad de vida”. “La Ciudad debe intervenir con decisión para mantener las tiendas de barrio que aún quedan y, sobre todo, para potenciar la apertura de nuevos establecimientos de esta modalidad”, han resumido.
Excelente idea.