Según datos del Ministerio de Fomento recogidos, los 20.120,4 millones de euros se corresponden con las 136.095 transacciones de vivienda libre que se hicieron en el periodo (-7,1%).
En concreto, las viviendas libres de segunda mano movilizaron 14.848,6 millones entre enero y junio (un 10,4% menos que hace un año), mientras que la cuantía en las de obra nueva fue inferior, con 5.271,8 millones (-32,8%).
En este caso, las transacciones cayeron un 26,3% en el primer semestre en obra nueva (hasta las 32.100 operaciones), mientras que subieron en pisos de segunda mano un 0,9% (103.995 unidades).
Andalucía fue la región en la que se registró mayor cuantía en las transacciones de vivienda libre en los seis primeros meses de 2012, con 3.642,9 millones de euros.
Por detrás se situaron: Cataluña (3.612 millones), la Comunidad de Madrid (3.010,5 millones), y la Comunidad Valenciana (2.567,6 millones).
A continuación se encuentran: País Vasco (987,2 millones), Canarias (937,6), Castilla y León (845,6), Baleares (721,3), Castilla-La Mancha (718), Galicia (697,1), Aragón (540,8) y Murcia (528,8).
Mientras, las regiones en las que el sector de la vivienda libre movió menos dinero fueron: Asturias (356 millones), Extremadura (298,8), Cantabria (244), Navarra (229,5), La Rioja (123,6) y Ceuta y Melilla (57,8 entre las dos).
Un descenso continuado en los últimos años
Desde que estalló la burbuja inmobiliaria, el movimiento en la venta de viviendas ha ido bajando por distintas circunstancias, pero de manera principal por la falta de concesión de créditos por parte de los bancos y de las cajas de ahorro. Son ya varios años en los que el descenso se ha ido incrementado y la última cifra se puede comparar el primer semestre de este año con el del pasado, donde el descenso se acerca peligrosamente al veinte por ciento. Y tampoco se atisba en el horizonte una posibilidad de recuperación en un corto o medio plazo al respecto.