La Unión de Radioaficionados instaló en el Parque Urbano Juan Carlos I una estación a través de la que se realizó un ejercicio de emergencia simulada a nivel mundial
La IARU (International Amateur Radio Union), órgano donde se integran todos los radioaficionados del mundo, celebró ayer el Globalset 2014, un ejercicio de radiotelecomunicaciones de emergencia simulada a nivel mundial. Por decisión de la Unión de Radioaficionados Españoles (URE), Ceuta se convirtió en la Estación HQ, por lo que fue la encargada de coordinar y enviar a la Estación HQ de Europa, ubicada en Inglaterra, todos los mensajes o comunicaciones que se produjeron en España.
El Parque Urbano Juan Carlos I fue el escenario elegido por la Unión de Radioaficionados de Ceuta para instalar una estación con la licencia especial solicitada para este ejercicio. Éste consistió en una situación simulada en la que se interrumpen todas las comunicaciones convencionales (teléfono, móvil, Internet...), entonces esta estación se hace cargo, con su equipo, de la coordinación, recepción y el envío de mensajes, es decir, de la comunicación.
El coordinador nacional de Emergencia de la URE, José A. Méndez, explicó en declaraciones a este medio que además de servir de entrenamiento, el ejercicio de ayer también ponía de manifiesto la importante labor de los radioaficionados, que tal y como les exige el reglamento de telecomunicaciones, colaboran en cualquier situación de emergencia en la que se requiera su trabajo.
Durante las horas en que se desarrolló el ejercicio, se pudo ver in situ la recepción y el envío de mensajes que se produjeron por parte de las estaciones españolas participantes, contribuyendo así a fomentar el interés entre los radioaficionados en las comunicaciones de emergencias, crear prácticas para realizar dichos comunicados y la retransmisión de estos mensajes a través de cualquier modo o banda.
Desde sus comienzos, hace casi un siglo, los radioaficionados han colaborado en la respuesta ante desastres o emergencias, papel que ha ido ganando más importancia en los últimos años debido al número y a las dimensiones de los desastres naturales y tecnológicos que se han producido en el mundo y a que las tecnologías de telecomunicación actuales son modernas pero cada vez más complejas, que dependen de grandes infraestructuras y, por tanto, cada vez más vulnerables.
Tal y como indicaron desde la Unión de Radioaficionados de Ceuta, éstos proporcionan una “alternativa de garantía”, por un lado una “gran red global”, compuesta por estaciones locales, nacionales e internacionales y, lo más importante, no dependiente de ninguna infraestructura; y por otro, un número de operadores “altamente preparados, que saben cómo comunicarse con recursos limitados pero que establecen comunicaciones incluso en las circunstancias más difíciles”.
De esta manera, el ejercicio de ayer sirvió para que los radioaficionados se prepararan para poder desempeñar este papel en una situación de emergencia y, al mismo tiempo, para que otros ciudadanos pudieran conocer su preparación.
Méndez cuenta con experiencia en respuesta ante grandes desastres
La labor de los radioaficionados ha ido ganando más importancia en los últimos años debido a su participación en la respuesta ante desastres naturales y tecnológicos que se han producido en el mundo, como el terremoto de Japón, el tsunami de Indonesia o el terremoto de Lorca. Por ejemplo, el coordinador nacional de Emergencia de la URE, el ceutí Méndez, ha colaborado, desde Ceuta con su equipo, en la respuesta ante catástrofes naturales ocurridas en Indonesia, Chile o Haití.