El coronavirus ha afectado duramente a la sociedad. Ha dejado sin festividades religiosas a muchas comunidades, al menos en lo que se refiere a cultos o manifestaciones de celebración con importante aforo o directamente multitudinarios. Una de las conmemoraciones que se han visto afectadas ha sido el festival en honor a Ganesh, de la comunidad hindú, que si bien se habrá podido vivir en la intimidad del hogar familiar, no ha podido ser celebrado con la vistosa y especial procesión que cada año recorre las calles de la ciudad y acaba con la inmersión en las aguas del mar.
El año pasado, la tradición en Ceuta ya se vio algo afectada, y el baño en el mar, fue sustituido por una ceremonia de inmersión mucho más reducida, en la Plaza de los Reyes y sin realizar su visita de respeto a la Patrona en la parroquia de África. Lejos de polémicas, este verano la razón y las medidas sanitarias por la pandemia de COVID-19 han provocado que, como ha ocurrido con otras muchas festividades de toda índole, se haya tenido que reducir a la mínima expresión: al ámbito familiar. No ha habido recorrido por las calles de nuestra ciudad, pero si el recuerdo a esta divinidad, una de las más populares del hinduismo.
Una de las familias que tradicionalmente lleva parte del peso organizativo de la celebración en Ceuta, la familia Mirchandani, ha querido compartir con toda la comunidad el rezo celebrado en su hogar y lo ha hecho a través de un evento en directo a través de las redes sociales.
Con cuerpo humano y cabeza de elefante, Ganesha o Ganesh, es venerado como dios que elimina los obstáculos, así que a buen seguro, los hindúes de nuestra ciudad y de todo el mundo, se habrán puesto en sus manos para que remueva el mayor obstáculo que ahora mismo tiene la humanidad: el coronavirus.
Ali y Ahmed, de los partidos correspondientes, os dais cuenta, er resto no se hace tanto de notar, no pasa nada, por no celebrar sus creencias, y la incitación habéis provocado , todos acatamos, pero de esto no os he visto decir nada, yyyaaa, verdad, claro yo lo sé, y espero pronto echaros de menos políticamente, es decir que desaparezcan