La plantilla del catering del CETI no aprueba que se suspenda la huelga

La huelga de trabajadores de Dulcinea Nutrición que debería haberse iniciado este lunes quedó suspendida el pasado sábado. Pero según ha podido saber El Faro de Ceuta, se ha desconvocado sin la autorización de los trabajadores.

Según conversaciones mantenidas con la representante de los trabajadores de la empresa, UGT recibió la noticia el pasado viernes que doce de los empleados habían recibido las nóminas quedando diecisiete pendientes. En ese momento, y a pesar de la negativa del conjunto de los trabajadores, se desconvocó la huelga debido a un error de comunicación. Esta medida no fue aprobada por la plantilla dado que “pensaban seguir adelante hasta que cobraran todos”.

Por su parte UGT reconoció que se había producido una confusión: “Nos hemos adelantado tras escuchar la noticia de que habían cobrado”, expresó Ramón Sánchez de UGT quien está asesorando a los empleados del CETI en el problema. En este sentido, Sánchez anunció que estaban barajando la idea de convocar otra huelga “por incumplimiento de convenio” refiriéndose a las repetidas faltas de las normas establecidas en el régimen laboral de la plantilla del servicio de catering.

La reiterada queja sobre los sueldos se suma a la ya nombrada falta de recursos y víveres en el Centro de Estancia Temporal de Inmigración, razón que limita el servicio ofreciendo un menú “insuficiente y precario”. Según una de las trabajadoras, llevan varios días sin fruta ni zumos, ofreciendo desayunos de café y pan seco. La escasez de alimentos se debe a una falta de liquidez de la empresa, viéndose afectado el centro ya que los proveedores “no llevan alimentos hasta que no cobran”. El problema de los sueldos se sumaría a la dificultad de poder ajustarse a los menús y a la ingesta calórica establecida. “La gente está echando chispas”, indicó la trabajadora.

El anuncio de cese de actividad se hizo público el día nueve de septiembre tras volver a sufrir impagos en sus nóminas. Varios días después, la empresa contactó con la plantilla para indicarles que cobrarían en un par de semanas. La concentración que estaba planificada para el día de hoy recogía la irregularidad de los plazos del abono de las nóminas, y por lo tanto, el impago de las mismas.

UGT reconoce el descuido interno

El viernes 13 de septiembre varios empleados comunicaron a la representante de los trabajadores que habían recibido el ingreso correspondiente a la nómina pendiente del mes de agosto, un total de 12 personas. Esa información se transmitió a UGT, donde se decidió cancelar la huelga convocada dando por hecho que la totalidad de los empleados iban a cobrar. Este error ha sido asumido por UGT Ceuta quien ya planea rectificar lo ocurrido con otras iniciativas.

Este hecho disgustó al colectivo de Dulcinea Nutrición quienes habían convocado la huelga hoy 16 de septiembre por impago de nóminas a partir de las 00.00.

Otras claves

Postura de la Delegación del Gobierno

La problemática del servicio de comidas del CETI se sucede desde varios meses atrás. Los empleados han instado a la delegada, Salvadora Mateos, que retire la concesión en las dos concentraciones que se han realizado en este año.

Por su parte, participó en la negociación con la gerencia de la empresa cuando el pasado mes de agosto se sucedió otro incidente de características similares.

Según UGT, quien también insistió a delegación de las irregularidades de la empresa de catering, están haciendo acopio de incidencias, porque además del asunto de las nóminas, también se ve afectado el servicio que se les da a las personas residentes del centro.

Otras huelgas contra Dulcinea Nutrición

En la jornada de ayer, las 16 trabajadoras de la concesionaria en el Campo de Gibraltar se manifestaron y reclamaron a la ministra de Defensa, Margarita Robles, que no “las dejara solas” ante el “abuso” de esta empresa para con la plantilla del servicio de comidas de los cuarteles militares. En su caso, afirman que llevan dos meses sin cobrar sus nóminas y del mismo modo que ocurre en Ceuta, también se suma la escasez de alimentos y de recursos para ofrecer el servicio establecido y los menús acordados.

Los trabajadores solo ven una solución

Bajo el grito “que la echen” se inició la primera concentración de este colectivo a las puertas del CETI. Y es que la única solución que estos trabajadores ven como “definitiva” consiste en eliminar la concesión del servicio a Dulcinea Nutrición y entregarla a otra entidad o que se realice un nuevo concurso. Temen que la situación “nunca termine” si siguen con la misma licitación y además esperan que eso suceda “antes de que se declare en quiebra” ya que en ese caso podrían no recibir los atrasos como ya les ocurrió hace un par de años.