La cata arqueológica que se ejecutó delante del Baluarte de la Bandera de Ceuta y que culminó antes de la primera semana de agosto no arrojó ningún condicionante para la plaza pública que está contemplada como parte de la propuesta para el Centro de Interpretación de las Murallas Reales. Esto según lo expresado por Fernando Villada, arqueólogo municipal.
Pero se trató de un resultado si se quiere previsible, pues Villada señaló que este sondeo respondió a una labor preventiva, más que se hubiese tenido una expectativa grande de que se encontrara algo de mucho interés ahí. “Lo más probable es que no lo hubiera, pero siempre hay que tomar precauciones”.
A propósito del tema, el arqueólogo explicó que “las labores en mucha medida se concentran en la prevención, actuar antes de que sea necesario actuar de forma mucho más drástica, por eso hacemos esas intervenciones previas, que se hacen continuamente en la ciudad y que veces dan hallazgos y otras da información que es vital para nosotros, porque necesitamos saber qué hay en el subsuelo”.
Es una cuestión muy comprometida “porque tenemos que proteger un elemento que ni siquiera vemos, que intuimos que puede estar ahí, con lo cual todas estas labores que se hacen previamente son muy importantes, esenciales”, agregó.
En el Baluarte de la Bandera y en las bóvedas anexas de las Murallas Reales se levantará un centro de interpretación, “entonces la Ciudad tenía interés en adecuar la parte de acceso, el interior se hace en colaboración con el Ministerio de Fomento y está el proyecto en marcha, pero ahora la Ciudad quería también abordar el espacio previo a ese centro de interpretación”. Esto deriva de un concurso público organizado por el Ministerio de Fomento y de acuerdo con Villada, aunque no estaba dentro de lo que se pedía específicamente, el equipo que ganó con la propuesta Resiliente hizo un planteamiento sobre la entrada a ese espacio museístico que se iba a crear.
“Entonces a la Ciudad le pareció oportuno y como paso previo lo primero que teníamos que saber era si había restos arqueológicos de ese espacio que se iba a afectar y a que cota del suelo, a qué altura si es que lo había, porque todo eso condicionaba el trazado de la plaza y las actuaciones posibles que hubiera”, comentó.
Excavaciones anteriores
“Hemos hecho nuestra intervención y lo que hemos documentado es que como teníamos entendido, como sabíamos por otras excavaciones anteriores, esto fue afectado cuando se construye el Parador Turístico de las Murallas, porque justo en esa zona lo que se hace es una galería subterránea”, dijo Villada.
Según el arqueólogo, “al hacer esa galería, una especie de pasadizo subterráneo, se destruyeron todos los restos arqueológicos que hubiesen ahí, eso es lo que ha sido”. Con estos resultados y esta comprobación, están terminando de elaborar la memoria completa, para enviarla a la Ciudad y a los arquitectos.
Algunos detalles sobre el proyecto del centro
A principios de junio informábamos en El Faro que la Consejería de Educación y Cultura había sacado a licitación en el portal de Contratación del Estado, la realización de un sondeo arqueológico en la Puerta Califal. La próxima ubicación del Centro de Interpretación de la Muralla, un espacio que revitalizará el entorno y el interior de este punto clave para el patrimonio de Ceuta. La zona sobre la que se licitaría este sondeo arqueológico era relativamente pequeña y en ese momento se informó que aunque la ubicación prometía datos interesantes, se trataba de un trabajo que se realizaba de manera preventiva.