La cascada de declaraciones para desestabilizar la coartada de inocencia de Antonio López en el 'caso Emvicesa' ha continuado esta tarde con la manifestación ante el tribunal de la Sección VI de la Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta de un presidente de una barriada que ejercía de intermediario en este particular negocio de la vivienda.
También han declarado varios 'clientes' es decir, personas que abonaron dinero para obtener una casa aunque esto fuera ilegal. Entre unos y otros se ha puesto negro sobre blanco que aquella rumorología que siempre existió en Ceuta en torno a las adquisiciones irregularidades de viviendas algo de fundamento tenía.
Abdelasis A.M., intermediario, ha declarado que tenía contactos con personal de Emvicesa y con Antonio López. Ha sido el segundo en declarar siguiendo el orden pedido por el Ministerio Fiscal de acusados dispuestos a reconocer los hechos.
El acusado, que en su día era presidente de la barriada del antiguo Poblado Legionario, ha indicado que varias personas contactaron con él para poder conseguir una vivienda de protección oficial. En concreto ha dado los nombres de 2. Uno abonó 15.000 euros por dos casas y una mujer dio 6.000 por una.
“Ellos vinieron a mí para que intermediara con Antonio López”, ha declarado. “Al ser gerente de Emvicesa sabía que podía conseguir una vivienda”.
Según el acusado, no se dejaba constancia documental de esos pagos y él se llevaba una comisión. Era consciente de que esas negociaciones no eran legales y de hecho se lo advirtió a los ‘clientes’.
Según este conseguidor, López le indicó que se podía obtener así una vivienda y para ello los ‘clientes’ solo tenían que estar registrados como demandantes.
Tras este acusado ha prestado declaración precisamente uno de esos ‘clientes’ aludidos que ha verificado que dio en metálico esos 15.000 euros. Le dijeron que ese dinero era para Antonio López y ese montante económico se lo dio a Abdelasis A.M. en su propia casa con el objetivo de disponer de una de las viviendas de protección oficial.
Ha manifestado que no firmó nada. “Yo sabía que no era legal, no era normal adquirir una vivienda de esa forma”, ha reconocido.
Nunca recibió la vivienda que esperaba. “Mi nombre no salió en la lista y llamé a Abdelasis, no me devolvió el dinero. A través de un amigo policía me dijo que lo mejor que podía hacer era declarar ante la jueza que llevaba el caso. Sabiendo que estaba mal” lo que había hecho “declaré”, ha reconocido.
A través de videoconferencia ha prestado declaración otro de los acusados como ‘cliente’ quien ha manifestado que contactaron con él. “Sabían que tenía problemas con familiares que carecían de vivienda. Me dijo que dando dinero saldría mi hija, mi sobrina… en la lista”.
Ese intermediario, ya fallecido, le manifestó que dando dinero se la entregaría a Antonio López para tener vivienda. Así lo hizo. Dio 20.000 euros por tener vivienda para 4 personas. “Me dijo que ese dinero era para Antonio López”, ha insistido.
“Cuando no tuve las casas le exigí la devolución de dinero, ahora estoy aquí, arruinada mi vida y las de mis hijas”, ha confesado.
El dinero se entregaba en mano. El afectado nunca fue a las oficinas de Emvicesa para reclamar por la pérdida de dinero ni tampoco recibió un compromiso escrito. Sabía perfectamente que lo que estaba haciendo era ilegal. “Era un enchufe y punto, así de claro”.
El dirigente de la UCIDCE, Laarbi Maateis, ha declarado esta tarde noche para negar que haya abonado dinero alguno por obtener una vivienda. Ha reconocido que contactó con varios funcionarios de Emvicesa y con Antonio López porque había un problema dentro del cementerio musulmán en donde residían tres familias.
“Era una vergüenza” ajena a la comunidad “porque vivían en un cementerio rodeado de tumbas”, ha destacado.
“Contacté para quitar esas viviendas y conseguimos sacar a esas familias”, ha indicado. Maateis, que no ha sido reconocido en el juicio como uno de los pagadores, ha negado que abonara dinero por obtener una casa para su familia. Tampoco habló para que nadie de su entorno familiar apareciera en la lista.
Una de sus hijas, señalada como ‘cliente’, ha indicado que figuraba como demandante de una vivienda de protección oficial pero que nunca pagó por obtener una casa: “Para eso me meto en una hipoteca”.
“Se me entregó un compromiso pero no me acuerdo que ponía, ni tampoco por quién estaba firmado”, ha detallado, negando conocer a López. Finalmente no salió en ninguna lista.
Un militar que figura como acusado ha reconocido en su declaración que sí pagó por tener una vivienda. Desconoce si López tenía algo que ver en esa intermediación solo que él entregó dinero al intermediario sin saber realmente a quién iba finalmente ese montante económico.
En torno a las nueve menos cuarto de esta noche ha dado por terminada la sesión judicial que comenzó esta mañana para ya pasar a la jornada del miércoles cuando declararán más personas supuestas ‘clientes’.
Las historias judiciales pueden dar miles de vueltas. Tanto que lo que se recoge en una calificación inicial de la Fiscalía puede finalmente derrumbarse como un castillo de naipes. Es lo que está ocurriendo en el ‘caso Emvicesa’.
De los casi 300 años en total contemplados por la Fiscalía de Ceuta para los más de 50 acusados se ha pasado a un guion bastante alejado de aquella realidad.
Las conversaciones entre abogados y representantes del Ministerio Público no han cesado. Pero no lo han hecho ni hoy, ni durante estos meses previos, ni hace un par de semanas cuando comenzó el juicio del mediático ‘caso Emvicesa’ y ya se apuntaba entre los pasillos la posibilidad de acuerdos que supondrían rebajas importantes.
En ese momento Fiscalía ofreció pactar a los ‘clientes’ si colaboraban lo que supondría una rebaja sustanciosa respecto de los 3 años de prisión solicitados por un delito de cohecho (pagar por la obtención de una vivienda de protección oficial) a 9 meses de cárcel y multa.
Han sido precisamente esos contactos los que han llevado a que el Ministerio Público pidiera alterar el orden de las declaraciones en la vista judicial de esta tarde. A pesar de las protestas formuladas por varios letrados la Sala lo ha aceptado sin perjuicio de que si en algún momento los abogados necesitaban prepararse mejor el interrogatorio así se hiciera.
En todas las declaraciones de hoy prácticamente se ha reconocido lo que necesita la Fiscalía para su base: que alguien pagó y que otros recogieron ese dinero para dárselo a Antonio López, lo que viene a fundamentar su escrito de acusación.
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