El jugador y capitán Jaime decidió este martes, por temas personales, pensando en su futuro profesional, abandonar el club. Es por ello que la AD Ceuta FC y Jaime llegaron a un acuerdo para la rescisión del contrato.
El club lo anunció a través de un comunicado, señalando que “ha llegado el momento de despedir a un jugador que es parte de nuestro escudo. Nuestro capitán, nuestro buque insignia”.
Tras siete temporadas en el club y portar el brazalete por todos los campos del grupo décimo “con el máximo orgullo, valor y coraje, nuestros caminos se separan”.
Únicamente “podemos darle las gracias por ser un caballero tanto en lo deportivo como en lo personal. Querido por toda la afición y por todo el vestuario, siempre ha ayudado a todo aquel que llegaba nuevo al equipo y a la ciudad para integrarlo”.
Casta, corazón, garra, sentimiento y orgullo caballa además de una grandísima profesionalidad y un amor ilimitado hacia “nuestro escudo y nuestra bandera”, añade el club.
"Se ha partido la cara por nuestro equipo"
En la nota de prensa se habla de Jaime, porque “se ha partido literalmente la cara por nuestro equipo, y ha dejado una huella muy profunda en la historia del club. Su valentía es innegociable”.
Para terminar, el Ceuta deja este recuerdo “nunca olvidaremos sus lágrimas en la puerta de vestuarios después de aquellos penaltis contra el Orihuela. Esta es y siempre será su casa”.
“Gracias por todo bicharraco. Gracias por tanto, C4PITÁN”, concluye la nota.
Jaime dejará el Ceuta sin haber podido conseguir el ascenso a Segunda División B.
El futbolista arrastró esta temporada problemas en una de sus manos, lo que hizo perderse varios partidos. Sin embargo, en el tramo final apareció y volvió a ser el que era. No pudo disputar el último compromiso ante el Prat por sanción. Así que su último encuentro con la AD Ceuta lo disputó en tierras catalanas en la ida de los play-off de ascenso.
Carta de despedida de Jaime
Jaime ha querido despedirse de la afición y el equipo con este mensaje:
"Bueno, llego el día de despedirse del equipo de mi ciudad, de mi tierra y de mi VIDA. Han sido muchos años defendiendo este escudo con orgullo y pasión. Me quedo con la espinita clavada de no haber ascendido al equipo a Segunda B, ya que este club como mínimo se merece eso. Hemos pasado buenos momentos y no tan buenos me has hecho crecer como jugador y como persona.
Ha sido un placer llevar esta camiseta durante 7 años y haber llevado el brazalete con orgullo ya que no sólo representaba a mi club, sino a mi ciudad por todos los lugares donde hemos jugado y eso no se puede describir con palabras...
Quisiera agradecer a todos los entrenadores que he tenido por la confianza que me han depositado siempre. Y tambien dar las gracias presidentes,compañeros, fisio, prefísico, utillero, prensa deportiva...
Y por último darles las gracias a la afición por como me habéis tratado siempre, nunca me ha faltado muestra de cariño por vuestra parte y porque siempre habéis estado ahí, en los buenos momentos y no tan buenos. Habéis perdido un capitán pero habéis ganado un aficionado. Muchas gracias".