La Comisión Europea pidió ayer a los Veintisiete que adopten decisiones sobre los menores inmigrantes no acompañados, MENA, en el menor plazo posible y como máximo antes de que cumplan seis meses de estancia en un centro de acogida.
La comisaria europea de Interior, Cecilia Malmstrom, presentaba un Plan de Acción para la protección de los niños de terceros países que llegan solos a los Veintisiete, la mayoría varones de entre 16 y 17 años y que a menudo se escapan de los centros de acogida en los que son recluidos cuando llegan a Europa, y que, en su mayoría, están acogidos en Ceuta, Melilla Canarias y Andalucía.
La mayor protección de estos inmigrantes es una de las prioridades de la presidencia española, que había pedido a la CE que impulsará medidas para atajar la llegada de niños solos a Europa. “Los menores son el grupo de inmigrantes más vulnerables”, por lo que la UE “necesitaba tomar cartas en el asunto cuanto antes”, afirmaba Malmstrom en rueda de prensa.
El plan recoge un conjunto de medidas comunes sobre la prevención, recepción, guarda legal, reunificación familiar y determinación de la edad de los menores, un asunto difícil porque muchos llegan sin ninguna identificación.
Para Bruselas es capital que se trate a estos menores como lo que son: niños, y por ello la CE sienta como prioridad la reunificación del inmigrante no acompañado con su familia, en la UE (si ellos ya están aquí) o en su país de origen, trámite para el que los Veintisiete necesitarán contar con la colaboración de los terceros países.
Precisamente, la voluntad de Bruselas de que prioritariamente los niños sean devueltos con sus familias a sus países de origen ha merecido ya algunas críticas del Consejo de Europa, no vinculado a las instituciones de la Unión Europea.
La CE ha llamado asimismo la atención sobre la falta de datos comparables sobre estos menores no acompañados y ha pedido a la agencia europea de fronteras exteriores (Frontex) que, en colaboración con otros organismos policiales de la UE, realice un análisis que permita una mayor comprensión del problema.
Registro de menores
Según la comisaria Malmstrom, "resulta muy difícil cuantificar cuántos niños hay porque están relacionados con la inmigración ilegal y no hay registros fiables". La mayoría de menores llegan a la UE a través de España, Malta y Grecia y proceden de países como Senegal, Mali o Mauritania.
Los menores llegan a Europa solos por razones muy distintas, desde la búsqueda de protección tras huir de su país, hasta la reunificación con su familia en la UE, o por ser víctimas del tráfico de personas para la explotación sexual o laboral.
En el caso español, la aspiración de encontrar un trabajo para contribuir a la economía de sus países de origen es la principal motivación de los menores que llega solos, según un estudio de la Red Europea de Migración difundido por la CE.