Aunque no sea exactamente hoy, la Policía Nacional de Ceuta ha celebrado este miércoles la fiesta de sus patronos, los Santos Ángeles Custodios, un día para remarcar la profesionalidad de la institución y sobre todo de los agentes que la conforman siempre dispuestos a servir y proteger a los ceutíes, así como su avance en los últimos años.
Lo ha hecho con la tradicional misa en la Iglesia de África y el posterior acto oficial a las 12.00 horas en las Murallas Reales en donde, tras la lectura de los discursos, se ha procedido a la imposición de medallas. Un evento al que han acudido las distintas autoridades y los condecorados, que han podido estar acompañados de sus familiares en un día tan especial para ellos. Después ha tenido lugar el acto más informal, un vino en el hotel Puerta de África.
Las familias son las que están siempre ahí para dar ánimos a los agentes en los peores momentos y para celebrar en los mejores. Es por eso que este miércoles ha tenido lugar esta tradicional copa de vino con la que se cierran los actos por el Día de la Policía Nacional.
Galardonados, allegados, familiares, amigos y demás autoridades han sido partícipes de este acto que, más distendido que los actos oficiales, sirve para compartir experiencias y poner en valor la parte más humana de este Cuerpo.
Hoy, día grande de la Policía, es importante también destacar la labor de la gran familia que integra la que es una de las instituciones más reconocidas en el país. Son muchos los hombres y mujeres que están detrás de cada uniforme y de los operativos en los muchos entregan sus vidas por hacer que la criminalidad aminore. Este miércoles también es un día para recordar y honrar a los que desgraciadamente ya no están.
Sin duda, una jornada especial para la Policía Nacional en la que también han podido sentir el cariño, apego y orgullo de los ceutíes por su trabajo diario y su profesionalidad.