Los años de campo y el haberse topado con muchos de estos artefactos en Ceuta fueron claves para que, este viernes, un cazador detectara en pleno monte quemado un proyectil sin explosionar que podía haber sido un auténtico
peligro. “Si alguien lo toca o lo mueve puede explosionar”, explica el cazador que, con su advertencia, ha evitado un mal mayor debido al número de personas que acostumbran a recorrer
estos puntos y que podían sufrir un percance grave. El protagonista de esta historia cuenta a El Faro de Ceuta que, nada más ver el artefacto, dio aviso a unos militares que se encontraban en la zona del campo de tiro, activándose así
las alarmas que motivaron la orden de perimetrar las cercanías a la explanada del Renegado, impidiendo el acceso al lugar en un radio de 3 kilómetros. En esa vaguada, asegura, hay muchos artefactos similares que suponen un peligro. Recuerda que hace muchos años a una persona le explotó uno de estos artefactos en la mano cuando lo cogió y manipuló. Por eso, su manera de proceder fue no solo la más adecuada sino también la responsable.
Un lugar con mucho peligro
En la zona hay muchas más de estas piezas enterradas desde hace muchos años, de ahí que la medida acordada haya sido la mejor para evitar accidentes de gravedad. Tal y como explicó la propia Delegación del Gobierno, además de este artefacto se han localizado restos inertes en un área que años atrás fue zona de caída de proyectiles. El problema es que el lugar es un punto de fácil acceso por lo que se dio orden de balizar las inmediaciones así como señalizarlas prohibiendo el acceso. No pueden pasar ni corredores, viandantes, ciclistas ni motos de campo que suelen verse y mucho por el lugar ya que supondría todo un riesgo. El gravísimo
incendio del 8 y 9 de septiembre arrasó con mucha parte del monte y dejó al descubierto zonas en donde había artefactos que han sido encontrados aunque ninguno como el de este viernes.