La Audiencia Provincial de Cádiz en Ceuta ha ordenado que se continúe la investigación del 6F por segunda vez, según fuentes consultadas por este medio. Tras los recursos presentados por las oenegés contra el auto que dictó sobreseimiento libre y archivo de la causa, el máximo órgano judicial de la ciudad se ha pronunciado para reabrir el caso ocurrido el 6 de febrero de 2014, cuando fallecieron 15 inmigrantes en territorio marroquí cuando intentaban bordear a nado el espigón del Tarajal en su intento de alcanzar Ceuta.
El caso ya se reabrió anteriormente por este mismo órgano tras un primer archivo, hasta que se agotaron las diligencias, acabando el Juzgado número 6 con todas las vías posibles de investigación. La magistrada Macarena García entendió que no aparece “debidamente justificada la perpetración de los diferentes delitos” y defendió las diligencias de prueba llevadas a cabo tras el auto de la Audiencia que consideró que estas estaban inconclusas. Sin embargo, se presentó un nuevo recurso ante la Audiencia, que ha provocado la reapertura de la causa teniendo en cuenta que no se ha realizado “el más mínimo intento de oír a los testigos propuestos y admitidos”.
La declaración solicitada por una oenegé a dos subsaharianos residentes en Alemania que dijeron ser testigos de los hechos no se materializó y este punto ha resultado clave para la reapertura del caso. El Tribunal de la Audiencia Provincial considera que no se ha realizado “el más mínimo intento de oír a los testigos propuestos y admitidos”.
La Audiencia fundamenta que el auto ha de verse nuevamente revocado y dejado sin efecto, continuándose la tramitación de las Diligencias Previas a fin de que se practique la prueba testifical a la que nos venimos refiriendo o, al menos, se intente su práctica con los medios técnicos y legales de los que actualmente se dispone, sin que sea necesario, en este momento procesal, entrar a conocer de los restantes motivos de recurso ni ello presuponga necesariamente el reconocimiento, ni siquiera el análisis, de indicio alguno de criminalidad respecto de los investigados.
En un claro ‘tirón de orejas’ a la labor hecha en instrucción, el auto recuerda que “lamentablemente” nos encontramos en la misma situación un año más tarde: en el mismo momento procesal.
La Audiencia insiste en las páginas de este nuevo auto en que ya en el anterior citado con fecha de enero se ponía de manifiesto que la instrucción no se había agotado, porque se había “confundido la pertinencia y la utilidad de algunas diligencias”, con el “convencimiento fundado o no” de que serían “imposibles de realizar”. Se refiere, en este caso, a la posibilidad de que los testigos testifiquen, puerta que ahora parece estar bien abierta.
El auto de la Audiencia lo que plantea ahora es que “lo importante” es “intentarlos oír y realizar los esfuerzos que sean posibles” por lograr sus declaraciones.
Otras de las razones que se esgrimieron en el momento del archivo de esta causa es la comisión rogatoria que Marruecos nunca contestó en la que se inquiría al país vecino información sobre el número de cadáveres recogidos en su lado tras la tragedia del Tarajal de 2014.
Un magistrado, el de enlace de España en Marruecos, Luis Francisco de Jorge, hizo referencia en un oficio del que se hizo eco este diario en el que el reino alauita no contesta a comisiones rogatorias procedentes de Ceuta o Melilla amparándose en razones de “soberanía nacional”, lo que valió para razonar que esta comisión rogatoria jamás sería respondida y empujó al archivo esta causa.
Totalmente de acuerdo. Quieren culpabilizar a la guardia civil sí o sí. Y cuando vuelvan a archivar la causa, ¿ qué ?. ¿ pataleta de nuevo, desprestigiendo a las fuerzas de seguridad?, .Y cuando os teque pagar los gastos, como ha ocurrido en alguna ocasion, segurísimo que llorareis porque sois unos pobrecitos que no tenéis para cubrir los gastos judiciales.
¡ Anda ya!.
La cuestión es que las ONGS. por narices, quieren buscar un culpable dentro de la G.C., y los culpables sólo son los traficantes con humanos y ellos que los esperan.