Un integrante de la UDYCO de la Policía Nacional de Ceuta ha prestado declaración este miércoles en la vista seguida para esclarecer el crimen de ‘Abslam’, el churrero, ocurrido en noviembre de 2021 en el Príncipe, para explicar cómo se llegó a la detención del acusado.
La primera noche solo encontraron testigos de referencia en la barriada, es decir, personas a las que les han contado los hechos pero no los han visto. Señalaban al acusado pero no tenían un valor probatorio aunque sí para las líneas de investigación que se estaban desarrollando.
Días después fue cuando se presentaron en la Jefatura Superior testigos que sí vieron el suceso a los que se les dio el carácter de testigo protegido ya que tenían temor a represalias.
Esas declaraciones fueron consideradas creíbles ya que complementaban las líneas de investigación previas que tenía la Policía, una serie de indicios que apuntaban a él. Uno de esos tres testigos protegidos dio el nombre del acusado resaltando que vio cómo disparaba. Hasta llegar a esa declaración la Policía Nacional por su cuenta ya tenía marcado al acusado como sospechoso del crimen así que estos testigos protegidos sirvieron para corroborar la línea de investigación “seria” que tenía esta unidad de lucha contra la delincuencia y crimen organizado.
Este miembro del CNP ha narrado cómo fue el escenario del crimen con el que se topó, describiendo el lugar en donde murió ‘Abslam’ como un punto “sin escapatoria”.
Los datos de la autopsia de una "muerte violenta"
El médico forense que realizó la autopsia al cuerpo de ‘Abslam’, el churrero del Príncipe asesinado en noviembre de 2021 en Ceuta, ha detallado hoy los resultados de ese examen.
Fue una “muerte violenta” producida por el disparo que destrozó las estructuras óseas y provocó una hemorragia en la base del cráneo.
Esa bala le provocó un traumatismo craneal que derivó en su muerte. Fue un disparo mortal de necesidad que impactó en el rostro, por lo que se concluye que la víctima estaba frente a la ventana por la que pasó esa bala.
El profesional ha indicado que ese disparo se habría producido a una distancia de entre metro y metro y medio, lo que se considera larga distancia. El cadáver lo vio ya en el hospital, a donde había sido trasladado en un vehículo particular.
Policía Científica: el disparo fue a larga distancia
Este miércoles también han prestado declaración las integrantes de Policía Científica que analizaron las heridas del fallecido quienes han detallado a través de videoconferencia que ese disparo que terminó con la vida de ‘Abslam’ se tuvo que producir a larga distancia, pero sin descartar una más pequeña.
Esa larga distancia es estimada entre metro y metro y medio, se habría producido a través de una ventana a la que se acercó el fallecido -es una hipótesis- recibiendo así el impacto del disparo que terminó con su vida. La bala no entró siguiendo una trayectoria perpendicular sino angulada y quedó dentro del cuerpo, es decir, no hubo orificio de salida.
La víctima presentaba además una herida en el labio “de origen punzante” que no ha podido concretarse más, por ejemplo sabiendo qué objeto lo causó. Las profesionales pensaron que esa lesión pudo haberse producido por un golpe, pero son valoraciones que se mueven en el marco de las suposiciones al no poder verificarlo. Es decir, ni pueden detallar qué la causó ni descartar cualquier posibilidad.