A primeras horas de la mañana, alrededor de las cinco, un incendio de origen incierto ha afectado a tres contenedores situados junto al colegio de Benzú, generando alarma entre los vecinos de esta zona de Ceuta.
El fuego, que aún no se sabe si fue provocado o fortuito, obligó a movilizar a los servicios de bomberos, quienes actuaron rápidamente para controlar la situación y evitar que ardiesen otras áreas cercanas.
Los bomberos utilizaron aproximadamente 1.500 litros de agua para sofocar el fuego y minimizar los daños.
De los tres contenedores afectados, dos han quedado seriamente dañados, mientras que el tercero solo se quemó parcialmente, gracias a la rápida intervención de las personas que llegaron al lugar al aviso de las llamas.
Preocupación por la proximidad del colegio
La cercanía del fuego a las instalaciones de la escuela ha sido motivo de preocupación para los residentes de Benzú aunque, afortunadamente, no hubo más daños materiales que lamentar, ni por propagación a vehículo ni al propio centro educativo.
Por el momento, no se ha podido determinar si el incendio fue accidental o si podría tratarse de un acto intencionado, y corresponderá a las autoridades comenzar una investigación para esclarecer las causas.
Como de costumbre, se ha solicitado la colaboración ciudadana o de cualquier testigo que pudiera haber observado movimientos sospechosos o alguna actividad inusual en las horas previas al incendio.
Las quemas, en el Pleno
Este incidente se suma a otros recientes sucesos en Ceuta relacionados con el vandalismo contra los contenedores y vehículos, lo que ha generado recientemente un intenso debate en el Pleno de la Asamblea.
El diputado popular Alejandro Ramírez respondió a Vox. El consejero confía en erradicar esta lacra mediante operaciones de colaboración entre Policía Local y Nacional (el CNP ha arrestado ya a 11 autores de daños por incendio en la llamada Operación Ardor), pero ha indicado que ha bajado un 60% la quema de contenedores de 2022 a 2023, mientras que en cuanto a coches la bajada es del 30% en tres años.
Además, recordó la puesta en marcha de las cámaras enmarcadas en el proyecto Safe City.
No obstante, esas quemas de contenedores han costado a las arcas municipales casi 10.000 euros este año.