Cuatro vecinos de Castillejos, entre ellos un menor de edad, continúan privados de libertad al ser vinculados con la organización de la primera concentración que tuvo lugar, hace dos viernes, en la localidad vecina con Ceuta. Por redes sociales se está distribuyendo un cartel con los rostros de todos ellos, pidiendo que sean puestos en libertad ante la injusticia que se está produciendo, acusándoles de algo que no han hecho.
Ellos son unos de tantos vecinos marroquíes que salieron a protestar el viernes 5 de febrero para que las autoridades abran la frontera del Tarajal. Ese viernes detuvieron a cinco personas, aunque una de ellas quedó en libertad. Los demás siguen detenidos a la espera de juicio, a pesar de que entre ellos hay un menor de edad. Todos los vecinos de Castillejos están denunciando la injusticia que se ha cometido con estas cuatro personas, reclamando que sean puestas en libertad. Las dos concentraciones no han tenido un organizador concreto, sino que ha sido algo movido a través de las redes sociales. A pesar de ellos, las fuerzas de seguridad detuvieron a estas cuatro personas acusándolas de la organización de un acto que terminó con cargas policiales y altercados.
La sesión judicial que estaba prevista para esclarecer la sentencia que recibirían los manifestantes detenidos se ha aplazado hasta la semana próxima. El motivo ha sido dar respuesta a las peticiones de abogados de la defensa para preparar sus argumentaciones. Precisamente el equipo de la defensa manifestaba sentirse "decepcionado" con la respuesta que el juez de la Audiencia aportaba a la solicitud que presentaban buscando la libertad temporal de los cuatro detenidos. Algo que consideraron, de hecho, una "falta de garantías" para asistir al juicio.
Las mismas fuentes agregaron que el juicio de los detenidos se llevará a cabo a distancia. El motivo, como no podía ser de otra forma, es el de seguir a rajatabla el protocolo sanitario impuesto desde las instituciones para hacer frente a la pandemia de COVID-19. Una estrategia de seguridad y prevención que, de este modo, ha de aplicarse también los tribunales.
Los cuatro detenidos (especificándose la minoría de edad de uno de ellos, de 17 años) han sido acusados de insultar a la fuerza pública, golpear y lesionar sus derechos y otros delitos como desobediencia, violación del estado de emergencia sanitaria o el no retirarse de la concentración. Eso sí, siempre recordando que los manifestantes iban completamente desarmados en el momento de sus reclamaciones.
Dirigentes y Autoridades Marroquíes ciegas e insensibles al Dolor, a las penurias económicas y al hambre que están pasando sus hermanos, su pueblo . Ellos seguro que comen todos los días y cobran todos los meses.