La suspensión de la Semana Santa 2020 a causa del coronavirus no solo afecta a los devotos que se quedaron si ver procesionar los pasos por nuestra ciudad sino que también ha sufrido importantes pérdidas económicas. En este caso, la agrupación musical Nuestro Padre Jesús Caído y Virgen de la Amargura decidió dejar “sin efectos” los contratos que tenían firmados con las hermandades a las que iban a acompañar musicalmente.
Además, los ceutíes entienden que cada banda tome su decisión. “Entendemos que cada una tiene derecho y es libre de reclamar a las hermandades con las que hayan firmado los contratos el cobro de los cachés acordados en su tiempo”.
A pesar de la mala situación económica de la banda quisieron recalcar que “decidimos no reclamar a ninguna de nuestras hermandades el pago de los contratos. No nos parece ético el reclamar dicho cobro ante la situación que también están padeciendo las diferentes hermandades”.
Eso sí, la banda de la Amargura vería con lógica que los contratos se renovaran para el próximo año. “Lo más importante para nuestra agrupación es renovar los contratos para 2021 con nuestras hermandades y realizar las actuaciones que teníamos acordadas para este año una vez se levante las restricciones por el estado de alarma”.
Por último piden compresión con la decisión tomada. “Esperamos que nuestra decisión sea respetada, aunque seguramente no sea compartida”.
Esta decisión es dura porque dejaría a la agrupación musical sin ingreso ninguno para afrontar el nuevo año.