El acceso a las dependencias del antiguo almacén de Intendencia de Ceuta, en la Rampa de Abastos, ha tenido que ser tapiado para evitar la entrada de personas. Ya en los últimos días se había detectado la presencia de un varón que está en situación de calle después del desalojo y derribo del espacio que había ocupado en San Amaro, frente al club Infanta Elena, en donde había llegado a acumular gran cantidad de palés de madera y restos de todo tipo. Ahora, desalojado de este punto al que continuamente vuelve, había comenzado a llevar restos a este lugar. De inmediato se ha tapiado la parte que ya estaba abierta y una ventana.
Una decisión que se adopta pero que viene a recordar el abandono en el que se encuentra este inmueble, en donde se proyectó ubicar el archivo general. De hecho, la Administración General del Estado adjudicó al estudio de arquitectura valenciano ‘Balman Consultores y Alejando Martínez del Río’ el concurso nacional de ideas convocado para la rehabilitación del edificio del siglo XVIII de la Rampa de Abastos como nueva sede del Archivo General y Museo de Historia Militar de la Ciudad de Ceuta. ‘Lienzo de la Almina’ es el título del proyecto ganador que sigue sin ver la luz.
Hoy por hoy la situación de este lugar es de abandono. Algo que ya denunció el PSOE hace un tiempo, poniendo de manifesto la inacción de la Ciudad lo que obligaría a devolver las instalaciones a Defensa, al haber sido incapaz de poner en marcha allí los proyectos de los que era competente.
Ministerio y Gobierno de Ceuta acordaron en 2016 ceder por un periodo de 20 años a la Ciudad, en régimen de concesión, este inmueble con la encomienda de su rehabilitación. Según se detalló, tras las obras se acogería aquí el Archivo General de la Ciudad así como un museo militar que, a su vez, se integraría una sala de interpretación del significado histórico de la construcción, todo ello financiado por la Ciudad, que también se encargaría de los gastos de conversación y mantenimiento.
Nada se ha llevado a cabo, lo que no hace sino aumentar los riesgos de entradas. En este caso concreto asoma al problema patrimonial el social, debido a que la persona que ha querido introducirse en este lugar necesita de intervención sociosanitaria urgente al no estar en sus plenas facultades. Se dedica a recoger restos que luego almacena lo que puede provocar una situación de peligro.
COMO SE PUEDE SER TAN DEJADOS Y OLVIDADOS DEL PATRIMONIO DEL EJERCITO EN TODOS SUS TERRENOS ES QUE NO HAY ALGUN PROFESIONAL QUE HAGA ALGO POR ESTA CIUDAD ESPAÑOLA.