El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, volverá a recibir este martes en la sede de su departamento en Madrid al presidente de Ceuta, Juan Vivas, que como hace un año y dos meses le volverá a plantear la necesidad de abrir la aduana comercial que España y Marruecos acordaron en abril de 2022 poner en funcionamiento en la frontera del Tarajal.
Además, el líder del Ejecutivo local insistirá en que el país vecino aplique el régimen de viajeros a sus nacionales que regresen con pequeñas compras efectuadas en la ciudad autónoma, una reivindicación que también comparten los agentes socioeconómicos.
Vivas planteará igualmente a Albares su aspiración de “eliminar definitivamente” la excepcionalidad que en el Tratado de Schengen permitía hasta la declaración de la pandemia la entrada en Ceuta a los residentes en la provincia marroquí de Tetuán solo con su pasaporte.
Tras el último encuentro entre Pedro Sánchez y el rey de Marruecos el presidente de la Ciudad ya dejó claro que “estamos de acuerdo con que las autoridades españolas puedan expedir visados limitados a Ceuta para favorecer el turismo de compras y los lazos humanos y con que siga habiendo controles documentales en el puerto para viajar a la península, pero en la frontera hay que establecer definitivamente la exigencia de visado”.
Desde su punto de vista volver al régimen anterior “supondría exponernos a recuperar el caos del tráfico rodado en parte de la ciudad, tensar servicios públicos como la asistencia sanitaria sobre todo en urgencias y maternidad, alterar la actividad portuaria o retomar aquellas imágenes de hacinamientos y ausencia de derechos laborales que caracterizaban al 'comercio atípico”.
De Albares dependerían también, aunque llevan tiempo en la nevera, reivindicaciones históricas de la ciudad como la de entrar en la Unión Aduanera europea, lograr un asiento en el Comité de las Regiones o recibir de las instituciones comunitarias un trato asimilable al de las regiones ultraperiféricas.
Sería una gran noticia que el Ministro atendiera todas y cada una de las demandas que plantea el Sr. Vivas, son todas beneficiosas y garantizarían un tratamiento justo para nuestra ciudad dentro del marco de la Unión Europea.
Si claro,cuando Ceuta deja de ser paraíso fiscal si de verdad quiere la implantación de una aduana comercial con Marruecos,hasta entonces nadie es ingenuo para confundir gato por liebre