El titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta ha dejado visto para sentencia un juicio por un delito de lesiones por imprudencia grave. El Ministerio Fiscal, tras escuchar a los múltiples testigos citados, ha seguido con su escrito inicial y ha solicitado la pena de 2 años de prisión, así como la inhabilitación especial para el ejercicio de la profesión médica y actividad sanitaria en el ámbito público y privado durante 4 años y 6 meses. Asimismo, ha reclamado que tanto la aseguradora del médico, como el Ingesa abonen una cantidad como responsabilidad civil y que esta sea calculada en ejecución de sentencia.
Los hechos referidos en este juicio ocurrieron en febrero del año pasado. La víctima, que era menor de edad, tuvo que acudir al Hospital Universitario por un cuadro de dolor testicular. El denunciante ha señalado que el acusado que, “apenas quiso atenderme”, le mandó unas analíticas y le dijo que eso era una piedra en el riñón y que seguiría teniendo dolores hasta poder expulsarla. Asimismo, la víctima ha declarado que en ningún momento le exploró la zona testicular a pesar de que le insistió en varias ocasiones. Además, ha añadido que tuvo un dolor similar en 2019, por lo que no le era desconocido y que ese hecho también se lo hizo saber al médico.
Después de darle el alta por un posible cuadro de cólico renal, el acusado acudió al día siguiente a su centro de salud ubicado en la avenida Otero para poder adquirir los medicamentos y un justificante por las faltas en el instituto. En esa consulta, según la víctima, también le profirió a la doctora que seguía teniendo mucho dolor y que cada vez su testículo estaba más hinchado. Una versión que ha sido rechazada por la médica que lo atendió quien ha aseguro que le confío que estaba mejor y que quería sobre todo las recetas para poder sacar los medicamentos de la farmacia.
Tras irse a su domicilio, de nuevo, el paciente siguió encontrándose mal y con dolores “insoportables” por lo que tuvo que acudir a Urgencias del Hospital. Ahí, ha explicado, no tuvo que ni que esperar ya que lo pasaron rápidamente a hacerle una ecografía. Tras ver la situación y avisado el urólogo, vieron la gravedad de la situación y decidieron operarlo de urgencias. La víctima ha añadido que le advirtieron de que iban a ser todo lo posible para salvar el testículo, pero que debido a que ya había transcurrido mucho tiempo iba ser complicado. Finalmente, el denunciante perdió el testículo y por ello dice que ha tenido diferentes problemas en su vida diaria, ya que le ha afectado psicológicamente.
El acusado, J.A.B.M., por su parte, ha expresado que la víctima en ningún momento aludió al dolor testicular, y que le dijo en todo momento que era en la zona abdominal. Asimismo, ha expresado que si el dolor proviene del testículo, es tan fuerte que no hay género de dudas del origen. “No le exploré la zona genital, porque él nunca me expresó que tuviera dolor ahí”, ha señalado el médico del Clínico de Loma Colmenar. Asimismo, ha asegurado que los síntomas que el menor le indicó no se asemejaban a una lesión testicular.
Otra de las personas que ha testificado ha sido la madre del perjudicado, que acompañó a su hijo en todo momento. Ha señalado que su hijo se fue a dormir y que de repente se despertó gritando, que le decía que tenía un fuerte dolor y que solo lloraba. Lo llevaron rápidamente a Urgencias y ahí, coincidiendo con la manifestación de su hijo, relató que se le advirtió al médico que el dolor era en la zona testicular y que incluso se le comentó que en el año 2019 había tenido unas dolencias similares. Ha insistido que el médico le expresó que tenía una piedra y que hasta que no la expulsara no se le iría el dolor. La madre del denunciante ha señalado que todo este proceso le ha afectado en la vida personal de su hijo, y que reclamaba por los daños sufridos.
La perito que ha declarado este jueves en la sala de lo Penal, ha añadido que el médico debería haberse cerciorado y haberle explorado la zona testicular para descartar cualquier tipo de lesión. Asimismo ha añadido que para haber salvado el testículo, las primeras horas fueron claves y que una vez transcurridas tantas horas era “casi imposible” salvarlo.
La médica que lo recibió en el centro de Salud de Otero ha señalado que no exploró al joven porque en ningún momento le indicó que le dolía la zona testicular. Además ha añadido que le dijo que estaba mejor, sin apenas dolor. Una versión que en ningún momento fue declarado ni por la víctima, ni su madre.
El urólogo que lo atiende, 72 horas después, solo ha añadido que ya estaba en la camilla cuando es avisado por el médico de Urgencias y que ve la gravedad por lo que proceden a intervenirlo quirúrgicamente.
Ya va siendo hora que la gente denuncie la mala praxis médica que hay en la ciudad de Ceuta.
Razón por la que la mayoría de los ceutíes nos vamos fuera, a la Peninsilanora ir sobre todo de médicos. En Málaga conocen bien nuestra situación, lo s sanitarios mismos nos lo dicen.
Ahora bien, a ver que dicen los jueces sobre estas negligencias , porque la mayor parte de las veces, " sigue, sin pasar nada" , como mucho, una multitud de 900€
Siii a malaga quien puede ,