La víctima, una joven de 18 años, vio al acusado pero no pudo asegurar que fuera éste quien en la madrugada del pasado 24 de agosto del año pasado quien, junto con otra persona, le enseñó una pistola para robarles el móvil y el dinero que llevaban encima
Es por ello que, ante la carencia de una prueba de cargo, el acusado F.M.A. quedó absuelto en el mismo acto de juicio. “No me acuerdo. No puedo asegurar que fuera él”, aseveró la joven.
El acusado respondió a las preguntas que le formularon el Ministerio Fiscal y la defensa. Aseguró en el momento de los hechos, ocurrido en el Paseo de las Palmeras, él se encontraba en su casa con su esposa y sus hijos. Nada más terminar de trabajar en una hamburguesería en la barriada del Morro, apuntó, se marchó a su casa donde permaneció desde poco después de la medianoche. Un delito de seguridad vial
Por otra parte, un joven, acusado de un delito contra la seguridad vial, no acudió al juicio que se celebró en su contra. Sin embargo, sí lo hicieron dos guardias civiles que intervinieron en los hechos y un taxista, contra cuyo vehículo colisionó el del acusado el pasado 20 de septiembre de 2015. El testigo aseguró que estaba estacionado en la parada de la avenida Compañía de Mar, cuando un coche le embistió quedando cruzado en la calzada. “Estaba muy alterado”, dijo el taxista. Por su parte, los guardias civiles que fueron requeridos en el lugar de los hechos, explicaron que el acusado presentaba síntomas claros de embriaguez. La Fiscalía pide una multa de ocho meses a diez euros diarios para el procesado.