La frontera para el transporte de mercancías cerrada a cal y canto. Es un nuevo capítulo de esta historia interminable. La Guardia Civil tiene orden de echar para atrás la salida de vehículos patera generando un embolsamiento de estos coches que llegan ya hasta la zona de la Almadraba, donde suman unos 200 coches de mercancías que consiguen entrar a la ciudad como a una jaula de la que no consiguen salir desde hace una semana.
Es la cara de la desesperación, de la agonía y la impotencia de unos hombres que esperan el momento de regresar a sus hogares, de reencontrarse con sus familias y poder continuar con su trabajo.
Son, incluso, 10 dias a la intemperie, desprotegidos y haciendo frente a todo tipo de situaciones.
¿Hasta cuando permaneceremos atrapados? Se preguntan, soluciones es lo que quieren y de forma inmediata, así no se puede seguir.
Y sin remedios a la vista llega la crispación y las manifestaciones. La primera tendrá lugar el lunes en el paso fronterizo del país vecino, porque ir a peor, todavía es posible.