Los vecinos de Tánger están atemorizados ante el aumento de actos delictivos cometidos por ladrones motorizados que circulan por algunas calles de la ciudad.
Inseguridad e intranquilidad es lo que experimentan las personas al salir ante la posibilidad de ser víctimas de alguno de estos delincuentes que se dedican a arrebatar bolsos y otras pertenencias.
Ante la situación que, de acuerdo con lo que reseñan los medios locales, ha empeorado, los afectados solicitan que haya mayor presencia de efectivos de seguridad en las calles para evitar que sigan ocurriendo los robos.
Algunos testigos de estos hechos señalan que el modus operandi de los ladrones motorizados es el siguiente: suelen ir dos personas montadas en la motocicleta y es una de ellas la que se encarga de quitarle las pertenencias a la víctima que muchas veces tarda en reaccionar y darse cuenta de lo que le acaba de suceder.
Numerosos testimonios de ciudadanos que han sido afectados insisten en que esta modalidad de robo ha ido en aumento y que los momentos en los que los robos son más frecuentes suelen ser en horas de la noche, especialmente en las zonas con escasa iluminación.
La calle Mohammed VI, adyacente a la Medina Corniche; la calle Mohammed V y la intersección de las calles Fez, París y Moulay Boussef; además de las plazas de Mozart, la Comunidad Árabe y Wadi Al-Makhzen. Estas son algunas de las zonas donde se registran cada vez más casos.
Muchos ciudadanos creen; Los intereses de seguridad; No muestra suficiente severidad respecto del crecimiento de estas actividades criminales; Lo que convierte los espacios y calles de la ciudad en un teatro de repetidas operaciones de este tipo.
“La mayoría son profesionales en actividades de carterismo”, han insistido algunas de las víctimas que insisten en la necesidad de reforzar la presencia policial en las zonas que se consideran más peligrosas, a fin de frenar la actividad de estos delincuentes que causan terror entre los viandantes.