No todo iba a ser sobre las motos. Tras una mañana sin parar y sobre ruedas, los más de 200 participantes en la concentración motera que se está celebrando en Ceuta este fin de semana se han bajado de sus vehículos para disfrutar de un rato de descanso y desconexión.
Como no podía ser de otra manera, el lugar escogido para ello ha sido el Parque Marítimo del Mediterráneo. La joya de Ceuta, un escenario de visita obligada para todos los que vienen que de fuera.
Allí, los moteros, han ido llegando desde las dos de la tarde para disfrutar de una comida una vez finalizada la ruta y la exhibición de trial indoor en el Parque de Juan Carlos I.
Además de comer y beber algo para refrescarse del calor, los motoristas han podido compartir entre ellos anécdotas y aventuras que han vivido con sus motos, estrechar lazos y forjar nuevas amistades, quedando pendiente reencontrarse pronto en una nueva concentración en una nueva ciudad.
El buen rollo se hacia palpable en el ambiente. Todos tenían ganas de exprimir al máximo esta experiencia que están viviendo. Para muchos era su primera visita a Ceuta y querían disfrutar de cada segundo en la ciudad.
Además de la comida, quienes quisieran podían aprovechar las instalaciones y darse un baño ya que tenían unas horas libres. Otros, por su parte, escogerían salir y conocer algunas zonas de la ciudad, pasear por el centro, sentarse en sus cafeterías o comprar en los diferentes locales comerciales.
La II Concentración Motera está siendo todo un éxito. Por la noche, volverán a reunirse en el Auditorio de la Marina para hacer entrega de placas conmemorativas y compartir otro rato de convivencia entre los afeccionados a las motos. Tampoco faltará la música para animar el ambiente aún más si cabe.