La sangre escasea en Tánger y los centros sanitarios necesitan reponer sus bancos con urgencia. Por ello el centro regional busca inyectar este material vital en la región, que atraviesa una acuciante escasez.
Como en otros muchos lugar, el centro organiza durante la temporada de verano campañas de sensibilización para movilizar a los ciudadanos con el fin de incitarlos a tomar la iniciativa de donar sangre y contribuir de esta manera a salvar la vida de pacientes y heridos.
La urgencia crece a cada día. La demanda de sangre está aumentando en hospitales y clínicas privadas. Uno de los principales motivos de este desabastecimiento es el alto índice de siniestralidad en el tráfico.
Las constantes muertes en la carretera, que dejan en el mejor de los casos varios heridos cada semana, se han vuelto un problema en Marruecos, donde estas víctimas se suman a las personas con graves enfermedades que también necesitan de las donaciones.
Si ponemos el problema en cifras, según fuentes del centro regional de transfusiones de sangre; tan solo las necesidades de la ciudad de Tánger de este vital material varía de 150 a 200 bolsas de sangre por día. Una cantidad compleja de alcanzar sin la solidaridad de los marroquíes.
Así, en respuesta a esta situación crítica, el centro ha destinado un espacio especial en la zona de la Corniche de Tánger, en el Paseo Marítimo, a la donación de sangre.
Un punto al que ya han acudido numerosos vecinos y visitantes para colaborar con el centro.
No es el único punto de colecta, ya que el centro también ha asignado unidades móviles que se dispondrán en las proximidades de varias mezquitas durante las oraciones del viernes.
Esta iniciativa tiene como objetivo alentar a los ciudadanos a contribuir a brindar apoyo a los pacientes que necesitan sangre con urgencia, y contribuir a preservar las reservas de sangre para emergencias médicas.
La sangre es valiosa, mas si acaba en centros privados.