Dentro de un contenedor durante horas. Así permanecen los inmigrantes que son interceptados por la Guardia Civil de Ceuta después de acceder a nado. Así están el tiempo que Marruecos ‘considere’ hasta aceptar su entrega. Pasa a diario en la frontera, la misma que hace escasos días visitaba el número 2 del Ministerio del Interior, Rafael Pérez.
En Melilla ese llamado rechazo en frontera se hace automático, pero en Ceuta todo es distinto. Antes, a las 23:00 horas los agentes del vecino país ya se negaban a admitir a los ‘nadadores’ permitiendo los rechazos solo a partir de las diez de la mañana. Ahora incluso a las 17:00 horas ya no los aceptan. Desde ese momento hasta la mañana siguiente, estas personas permanecen dentro de un contenedor.
No es algo que se oculte. Esta infraestructura propia de cualquier obra está a la vista, en pleno Tarajal, funcionando como una especie de búnker. Antes se llegaron a emplear unos baños, pero tras producirse fugas y peleas se optó por utilizar este contenedor ubicado en la parte lateral más próxima a la zona de la playa.
Las instituciones políticas son conocedoras del uso que se da y del empleo que hace la Guardia Civil sin que hasta la fecha nadie haya anulado este proceder, lo que evidencia la connivencia de las administraciones con la ejecución este tipo de prácticas cuanto menos cuestionables.
La cuestión que nadie quiere responder y la clave de todo este asunto
¿Por qué Marruecos no recibe inmigrantes, que son además sus nacionales, durante las 24 horas del día? Esa es la cuestión que nadie quiere responder y la clave de todo este asunto. En la última comparecencia pública del número 2 del Ministerio del Interior, Rafael Pérez, no hizo mención alguna ni desveló crítica al comportamiento entre fronteras que se aplica a pie de espigón a pesar de haber visitado sus infraestructuras.
Su mensaje se centró en enumerar las inversiones hechas por el Gobierno de España en Ceuta, ni una sola frase dedicada a la nula agilidad en los rechazos de ‘nadadores’ ni menos a la infraestructura que se está empleando para tenerlos encerrados horas hasta que Marruecos acepte su entrega.
El vecino país no admite más que a sus nacionales e incluso hay casos que ni eso. Lo hace además marcando horarios.
¿Quién se hace responsable? De ocurrir una desgracia dentro de esta infraestructura no queda claro a quién se le exigirían explicaciones
Legalmente no se establece un tiempo concreto para ejecutar el llamado rechazo en frontera, aplicándose la máxima de que el inmigrante no ha entrado todavía en España puesto que es interceptado en la orilla, difuminando de esta forma la existencia así de una detención y una posterior entrega a la Policía Nacional.
Es lo que siempre ha mantenido el Gobierno desde los tiempos convulsos del 6F hasta la actualidad, exponiendo un mensaje nunca claro de los límites para considerar las entradas en nuestro país que ha generado controversias claras.
Ese debate nada tiene que ver con el lugar elegido para tener horas y horas a estas personas hasta que Marruecos acepte su entrega.
La Guardia Civil los sigue trasladando a un contenedor. La clave radica en que cualquier día puede ocurrir una desgracia por tener a personas durante horas dentro de este tipo de infraestructuras aplicándose medidas que, al menos, son cuestionables y que exigen definir un responsable sobre esta toma de decisiones y sus posibles consecuencias. Ya se han producido incidencias.
En Marruecos hay hoteles de lujo para estas personas que entran ilegalmente en el país. Menuda panda de ignorantes que comentan las cosas, y solo critican en España
Increible que pasen estas cosas en el tiempo en el que estamos meter a personas como si de animales se tratara
Que medios se usan para determinar la filiacion y la nacionalidad marroqui del que entro a nado?
De momento que lo metan en un hotel o te los llevas a tu casa.
No es razón de meterlos en casa de uno u otro, sino que se los trate como a personas y nadie dice que no se les expulse, que la Ley y hay que cumplirla.
Como siempre......el mochuelo se lo sueltan a los que trabajan para comer, mientras los que trabajan menos estan sentaditos en buenos sillones y a la sombra.