Se hacen llamar ‘Mujeres Anónimas’. Ellas, desde la humildad, sin protagonismos pero con una capacidad de lucha impresionante hacen una labor increíble en favor del necesitado. No miran religión, solo miran calmar las carencias de quien no tiene lo más básico, del que no puede cumplir con los requisitos mínimos para salir adelante: ropa, comida, agua, luz...
‘Mujeres Anónimas’ se dio cuenta, allá por 2012, de que algo no funcionaba y se pusieron en marcha como asociación para atender a las familias. Ya son más de 200 las que reciben algún tipo de atención por su parte. Y lo hacen con empeño, quitando horas a los suyos para que el resto no pase necesidad.
CCOO ha estado acertado a la hora de elegirlas Premio Maite Alascio 2023. Porque en ellas nadie se había fijado, porque en su lucha nadie había reparado. Por eso si meritoria siempre es la elección que haya podido hacer el sindicato en otros años, más aún lo es con esta asociación que todavía tiene que hacer frente a la atención a familias que en pleno siglo XXI carecen de lo más básico.
Ellas están en todos los momentos clave, en esos periodos del año marcados por una mayor sensibilidad como es la celebración de la Navidad o el Ramadán. Ellas están ahí para que a nadie le falte lo mínimo.
Esta semana venidera recibirán el ‘Maite Alascio’, un premio que además mantiene vivo el nombre de esta luchadora, de quien fue un referente de mujer, de quien siempre CCOO mantiene viva como ejemplo de la lucha femenina.
Gracias a la labor de ‘Mujeres Anónimas’, 200 familias están algo más alejadas de la pobreza. Y gracias al sindicato, muchos que aún no las conocían sabrán de ellas y sabrán de cómo en Ceuta tenemos a personas altruistas, de buen corazón que solo piensan en el bienestar de los demás.