Ayer nuestra ciudad recordó dos veces la figura de quien fuera concejal de Ermua, Miguel Ángel Blanco, en el vigésimo aniversario de su asesinato a manos de la banda terrorista ETA. Por la mañana, las instituciones, ante la fachada del Palacio de la Asamblea, guardaron un minuto de silencio por la persona que con su muerte llevó a millones de españoles a la calle, convirtiendo a partir de ese mes de julio de 1997, un antes y un después en la conciencia popular frente al terrorismo de ETA. Por la tarde, al igual que sucede todos los años, Nuevas Generaciones del Partido Popular, se dio cita en la Plaza de la Constitución para recordar a quien fue uno de sus compañeros. Fueron unos días de auténtica participación popular en todas las ciudades españoles. Momentos de indignación ante la cuenta atrás que había hecho ETA intentando extorsionar al Gobierno del Partido Popular presidido por José María Aznar. Sin embargo, también se produjo, como decíamos antes, ese cambio en la actitud. Se comentó a ver una reacción popular como hasta entonces nunca se había conocido. Y tienen razón muchas persona cuando señalan que fue el día en que comenzó la derrota de la banda terrorista ETA que, aún continuaría matando varios años más.