La Consejería de Servicios Sociales de Ceuta continúa con el proceso de mejora puesto en marcha en la Residencia de Nuestra Señora de África con el objetivo prioritario de mejorar la calidad de vida de sus residentes y, en consecuencia, de renovar las distintas estancias del geriátrico y el mobiliario y equipamiento de las mismas.
Así, entre las más de 60 actuaciones ya desarrolladas, se encuentran la compra de enseres y material para las habitaciones, incluyendo nuevos televisores de 32'' y colchones. También se ha procedido a la renovación del jardín con la adquisición de tumbonas y mobiliario para este espacio.
La cocina es otra de las áreas en las que el departamento que dirige Dunia Mohamed, de la mano de la dirección de la residencia, encabezada por Gonzalo Barredo, ha efectuado mejoras con la compra de equipos industriales, congeladores y nuevas estanterías, entre otros equipos.
Con una inversión superior a los 240.000 euros, la Consejería de Servicios Sociales también ha completado la compra de material de lavandería, enfermería y asistencia, incluyendo nebulizadores, monitor multiparámetrico, reanimador manual, de parada, mesas ‘cigüeña’ para camas basculantes, silla de higiene, grúa eléctrica o camillas de ducha hidráulicas.
Ultima la contratación de productos textiles y mobiliario
Este proceso aún no ha culminado, puesto que ya está ultimándose la contratación de productos textiles. Asimismo, ya está adjudicado y solo pendiente de recibir, otro tipo de mobiliario, entre el que se encuentra sillones, mesas, armario, sofás, camas articuladas o nuevas mesitas de noche.
El objetivo de todas estas mejoras no es otra que mejorar la calidad de vida de los usuarios, así como facilitar y acompañar el trabajo diario de quienes les atienden desde sus respectivos puestos laborales.
La consejera, Dunia Mohamed, recorrió recientemente las instalaciones del centro, dependencias donde el Gobierno de la Ciudad está llevando a cabo estas actuaciones.
Y también han comprado papel higiénico.
Parece esto la obra de teatro que ví anoche, Los Santos Inocentes, migajas de pan para los pobres y hay que aplaudirles, de vergüenza.