Tal y como ha avanzado el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, a ‘El Faro’, el compromiso de lograr esta instalación deportiva está vigente, aunque se “haya tenido que parar el balón” debido a la imposibilidad de obtener los nueve millones de euros que se requerían para la actuación en los terrenos de Loma Colmenar.
“Tenemos este compromiso, y estamos viendo emplazamientos como usar las instalaciones del tiro de pichón en donde, según los técnicos cabe una pista para la práctica del atletismo satisfactoriamente”, indicó Vivas.
La idea, tal y como hiciera pública hace un par de semanas la consejera de Deportes, Susana Román, es apostar por una pista orientada no ya a la competición sino a modo de escuela de aprendizaje de una modalidad deportiva que en Ceuta tiene múltiples seguidores. Con el dinero comprometido por Madrid se daría viabilidad a este plan.
Un equipamiento esperado desde 1985 y con varios proyectos en el camino
La construcción de la pista de atletismo se ha convertido en el cuento de nunca acabar. Desde 1985 se ha puesto el asunto encima de la mesa, arrastrando la redacción de varios proyectos así como cuantiosos compromisos políticos que garantizaban su viabilidad. Más de veinte años de espera en los que se han sucedido diversas intervenciones más o menos mediáticas y en los que se han proyecto hasta realidades virtuales de lo que tendría que haber sido ya esta obra. La última convocatoria de obra y proyecto se llevó a cabo entre diciembre de 2010 y enero de 2011, y terminó quedando desierto. Ahora la sorpresa la ha dado la crisis económica y surge la novedad del tiro de pichón. Atrás quedan hasta 17 bocetos distintos; el primero, en 1985 y el último en marzo de 2010. Hubo además, a principios de este año, la convocatoria de un concurso de obra y proyecto que dejó buen sabor de boca con varias apuestas arquitectónicas.