Los alumnos del Santa María Micaela portaron ayer el paso desde la Iglesia de San Juan de Dios hasta el colegio, recorriendo así en la tradicional procesión de los niños los alrededores de la barriada de Villajovita. Primero se celebró una misa en la que estuvieron presentes los alumnos y sus padres, y después los pequeños demostraron todo lo aprendido en la ‘Escuela de Costaleros’ que organiza desde el pasado año la AMPA del Santa María Micaela.
Más de 40 niños han participado en esta edición de un curso que intenta transmitir una tradición a los pequeños, para que estos la mantengan la hagan aún más grande.
La procesión dejó a su paso bonitas imágenes para el recuerdo, debido a que el tiempo acompañó y los pequeños pudieron lucirse. La organización tuvo un detalle con Eroski, a cuyo representante entregaron una medalla. Eroski participó el pasado jueves en los actos poniendo la merienda para todos.