El Movimiento por la Dignidad y la Ciudadanía (MDyC) considera que el Día de Ceuta debe ser un día, sobre todo, de reivindicación y también un día de celebración, un día para conmemorar aquellas cosas que nos unen como miembros de nuestra ciudad, un día para ensalzar los valores que marcan nuestra convivencia, un día en el que deben participar todos y todas las ceutíes, en el que se demuestre que somos españoles.
Para el MDyC el Día de Ceuta debe ser, sobre todo, un día de reivindicación, un día para reclamar nuestros derechos y sobre todo para demandar la posibilidad de un desarrollo económico y social en pié de igualdad, un día en el que exijamos que los servicios que recibimos se equiparen con el del resto de conciudadanos de España.
Sin embargo, hoy como desde hace quince años, nuevamente volveremos a oír ese discurso empalagoso de nuestro Alcalde en el que glosará sus fracasos y su incapacidad para gestionar un Ayuntamiento con una deuda de más de 220 millones de euros; volveremos a oír sus grandes proyectos, sus inmensas ideas, mientras que seguimos teniendo más de trece mil parados, las familias por debajo del umbral de la pobreza suponen más del 40% y los índices de pobreza infantil son de los más altos de España. Esos son los resultados de quince años de Desgobierno del Sr. Vivas.
Nos encontramos ante una situación de la Ciudad en la que el Partido Popular y el Desgobierno del Sr. Vivas no tienen ninguna capacidad de respuesta, no tienen soluciones para desarrollar nuestra economía, carecen de ideas para ponerlas en marcha y sobre todo, que es lo peor, no creen en el futuro de la ciudad. Su falta de proyecto de futuro les lleva a estar cambiando sus decisiones de un día para otro como el vendaval, alegando la defensa de unos intereses generales que parecen responder a los intereses particulares.
El Día de Ceuta debe ser un día en el que reivindiquemos nuestros derechos, un día en el que, entre todos y todas, podamos celebrar la capacidad de poder vivir juntos en esta maravillosa tierra.