El Instituto de Migraciones de la Universidad de Granda (UGR) también se ha manifestado al respecto de las entradas masivas que en los últimos días acontecían en Ceuta. "La noche del lunes 17 de mayo se produjo una entrada sin precedentes de personas, que los medios y la opinión pública han llamado 'inmigrantes'", recordaban en un comunicado, en el que remarcaron que este suceso ocurría "sin ningún tipo de control" y ante la sorpresa de la Ciudad.
Se refieren a ella como la "mayor entrada" fronteriza en la historia de España, y aseguran que supera incluso a la registrada a finales del año 2020 "cuando centenares de cayucos llegaron de la noche a la mañana al puerto de Arguineguín, en Canarias, y por encima de las últimas grandes crisis migratorias del siglo XXI".
"Este drama es continuo en las Islas Canarias, en Ceuta y Melilla y en las costas del sur de España, especialmente, en las provincias andaluzas. El litoral granadino es testigo de personas que se juegan la vida para llegar a Motril, Calahonda, Castell de Ferro, La Rábita y un largo etcétera. Pero no solo es un drama en nuestro entorno", lamentan. Se respaldan además en las informaciones de la Organización Internacional de las Migraciones (proyecto Migrantes Desaparecidos) que resaltan que, en el año 2019, fueron "1.091 las personas muertas o desaparecidas sólo en el Mediterráneo tratando de cruzarlo para llegar Europa". El anterior año fueron, apuntan, 2.299 y el anterior 3.139. En el 2016 "se alcanzó la cifra de 5.143... desgraciado y aciago récord".
"Para que se hable de las migraciones tienen que ocurrir sucesos como estos y ello explica que al final de lo que se habla, injustamente, es del “problema” de la inmigración. Parece como si la humanidad hubiera olvidado que no solo son siglos y siglos de dicha práctica, sino que la migración está indefectiblemente unida a la propia historia de la especie humana y a su evolución. Parece que olvidamos que todas las personas que habitamos el planeta estamos unidas de alguna manera a dicho fenómeno y deberíamos aprender a gestionarlo sin que supusiera ninguna desgracia", advierten.
En consecuencia, condenan las devoluciones “en caliente” que se están produciendo, también de menores, "sin garantías ni protección de los migrantes por parte de las autoridades y su misma instrumentalización", que "vuelven a evidenciar una vez más la terrible deshumanización que se hace de las personas" en función del estado de las relaciones entre España y Marruecos. "La lamentable respuesta de la Unión Europea pone el foco también en la desorientación del gobierno español, al mismo tiempo que ambos niveles eluden responsabilidades". Para el Instituto de Migraciones de la UGR, el hecho de que la UE quiera dar más peso en la zona a Frontex, una agencia "sin control del Parlamento Europeo" resulta "asombroso" y "frustra" cualquier intento de "repensar" las relaciones con Marruecos y el África más septentrional. "Y también de pensar la gestión de las migraciones con otras formas".
Por otro lado, consideran que se hay personas y grupos políticos que están "instrumentalizando" a las personas inmigrantes. "Se trata de discursos de odio que fomentan diversas formas de racismo y xenofobia y que pretenden criminalizar a esas personas migrantes con el único y perverso interés de ganar réditos políticos".
"Inmersos como estamos en un proceso que exige profunda solidaridad y justica social por lo que ha supuesto para toda la humanidad una pandemia mundial provocada por la COVID-19, que ha agravado la situación de desigualdad en la que se encuentran miles de personas en la vecina África y de la que es partícipe Europa, debemos repensar también nuestras maneras de tratar el fenómeno de las migraciones con mucho mayor apoyo a las investigaciones sobre este (que tanto retroceso financiero ha sufrido en los últimos años)", señalaron. Los medios apropiados para tratar las migraciones, apuntan, no pueden ser la "utilización" de seres humanos en estos asuntos ni tampoco "la gestión de fronteras impermeables".
"Por todo lo dicho anteriormente, el Instituto Universitario de Migraciones solicita de las personas con responsabilidad pública y de gestión de gobierno, un trato digno a todas las personas migrantes, sin olvidar ese especial trato para aquellos y aquellas que sean menores. Todo ello de acuerdo con nuestros compromisos internacionales y obligaciones constitucionales, concluyen.
A que Espera ESpaña para fortalecer físicamente la Frontera y si fuera necesario con un muro de Hormigón de 10 metros. Y por descontado prolongar el espigon por lo menos medio kilómetro, para que el que quiera entrar se lo piense dos veces.