Ante las entradas masivas a nado que se iniciaban este lunes en Ceuta, desde la Confederación Española de Policía (CEP) se pedía un refuerzo "urgente" de los efectivos de la plantilla de la Jefatura Superior de Policía de Ceuta. Aseguraban que más de la mitad de los más de 2.700 inmigrantes que llegaron entraron "en poco más de dos horas".
"En el día de hoy nos encontramos ante una situación en la que los miembros de la Policía Nacional están desbordados de trabajo por la entrada de miles de inmigrantes (de ellos, 800 son menores de edad) y que en estos instantes no cesan. Han querido recordar que la Jefatura Superior de Ceuta es "una de las que más efectivos a perdido en los últimos años, triplicando la media nacional en descenso de agentes y provocando que todo el trabajo migratorio y el del resto de áreas policiales recaiga cada vez sobre un menor número de efectivos".
Tanto los miembros de la Policía Nacional como los de la Guardia Civil se encuentran con la "carencia" habitual de efectivos para "salvar a los subsaharianos que intentan cruzar la frontera y se encuentran en peligro de ahogamiento". Muchas de estas personas han huido de las autoridades policiales y recuerdan que esto puede suponer otro importante daño colateral ante la posibilidad de que algunos de ellos, ahora en paradero desconocido, fuese portador de la COVID-19.
La AUGC (Asociación Unificada de Guardias Civiles), asociación mayoritaria en la Guardia Civil, ha solicitado que se aumente "urgentemente" el catálogo de puestos de trabajo en Ceuta y Melilla, "donde es necesario dotar con más medios humanos y técnicos, así como la instalación de medios contención adecuados".
"Los guardias civiles no pueden seguir siendo escudos humanos ante esta crisis migratoria", señalaban desde AUGC. Interior ha anunciado el despliegue de cerca de 50 agentes del Instituto Armado, así como 150 efectivos de la Policía Nacional.