Tras las últimas informaciones, el Sindicato de Enfermería en Ceuta (SATSE) reitera que la ciudad autónoma tiene 7 camas UCI y, "para poder avanzar de fase en la desescalada", el INGESA "ha tenido que coger" las 9 camas de Reanimación y "poner a disposición de la pandemia" las 20 camas de Cirugía Mayor Ambulatoria. Según los cálculos del sindicato, la UCI de Ceuta, sin pandemia, cuenta con 7 camas y, una vez que termine la crisis sanitaria o el coronavirus esté controlado, "volveremos a esa cifra".
Durante la pandemia, asegura SATSE, el INGESA "ha quitado" las camas de Reanimación y de Cirugía Mayor Ambulatoria como tal "porque no ha habido intervenciones programadas a excepción de las urgentes que no pudieran demorarse, como un accidente de tráfico o una cesárea. El resto se suspendió".
Por tanto, el sindicato considera que no se puede decir que Ceuta disponga de 17 camas UCI como afirma el INGESA: hay 7 camas UCI y se han utilizado 9 camas de Reanimación y 20 de Cirugía Mayor Ambulatoria, según sus estimaciones. SATSE aclara que no pone en duda que esas camas "estén preparadas" para atender a pacientes con COVID-19, ni tampoco que Ceuta "pueda promocionar de fase, porque sí que tenemos esas camas a disposición del coronavirus aunque a costa de paralizar toda la intervención quirúrgica programada".
"Obviamente, esa congelación de la actividad quirúrgica solo se puede realizar en un periodo de tiempo corto y determinado, no se puede suspender la cirugía de toda Ceuta hasta que haya una vacuna contra el coronavirus", explica SATSE. "Pero es más, una vez que se consiga la vacuna y todo vuelva a cierta normalidad, la UCI de Ceuta seguirá siendo escasa, mínima para nuestra población porque la ciudad autónoma debería tener 2 camas por cada 10.000 habitantes, es decir, 18 camas no por el COVID-19, sino en condiciones normales y todo ello sin contar con la población flotante", argumenta esta representación de los trabajadores.
La actividad en el quirófano se está reanudando paulatinamente "porque no hemos tenido más ingresos de COVID-19 en UCI y se están utilizando las camas de Reanimación para el postoperatorio", añade SATSE. "Si Ceuta hubiese tenido un índice similar al de otras autonomías más afectadas, no hubiéramos podido reanudar las intervenciones quirúrgicas", concluye el sindicato sobre las camas de UCI.
Plantilla de enfermeras en UCI
SATSE defiende que la plantilla real de la UCI, "no de la expansión de la UCI que desaparecerá cuando acabe el COVID-19", tiene que experimentar un "incremento" porque la ratio mínima que baraja es de dos pacientes por cada enfermera y, sin embargo, "cada profesional se ocupa de 2,3 pacientes en turno de mañana y tarde, y de 3,5 pacientes en el turno de noche. Unas cifras que hay que sopesar teniendo en cuenta que el estado de estos ingresados es crítico".
En cualquier caso, el aumento de capacidad de la UCI es una potestad del INGESA Madrid, al ser su competencia exclusiva, subraya SATSE.
Por último, SATSE pide al INGESA "claridad" porque precisa que en ningún momento este sindicato ha negado que sean tres los profesionales sanitarios contagiados en su lugar de trabajo, sino todo lo contrario, "se ha congratulado de que el INGESA reconociese a los enfermeros el contagio como enfermedad profesional".