El delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, comunicó ayer que, según las previsiones de la dirección facultativa de obras, los trabajos de movimientos de tierra para el nuevo Centro Penitenciario de Ceuta culminarán a principios de enero de 2011 “y a continuación se iniciará la ejecución material de los edificios e instalaciones que conformarán el nuevo complejo penitenciario y el Centro de Inserción Social asociado”.
El representante gubernamental dijo que dicho proyecto “implican una inversión muy superior a los 100 millones de euros, con la consiguiente creación de riqueza y empleo en la ciudad desde sus inicios, además de los beneficios para los funcionarios y laborales en el desempeño de su trabajo, y de las personas que cumplen condena y sus familias”.
Fernández Chacón dijo que dicho centro “está concebido urbanísticamente como un núcleo urbano autosuficiente dotado con todas las infraestructuras necesarias para ello, en definitiva, una pequeña ciudad formada por doce centros con servicios culturales, sanitarios, deportivos y productivos comunitarios, que cubrirán las necesidades de los internos y potenciarán la política de reinserción, objetivo prioritario de la administración penitenciaria”.
Dicho centro será inaugurado, o al menos así lo espera el delegado del Gobierno según el calendario previsto, en 2012.
El representante gubernamental en Ceuta agradeció también la colaboración de la Ciudad, y más concretamente de su presidente, Juan Vivas, “quien ha sabido comprender la importancia social y económica del nuevo complejo para nuestra ciudad”, manifestó.
Fernández Chacón felicitó a los funcionarios y a las instituciones y organizaciones sociales a las que Prisiones reconoció su labor.
El acto contó con gran presencia institucional. Entre otros, acudieron el comandante general de Ceuta, Enrique Vidal de Loño; el consejero de Gobernación, José Antonio Rodríguez Gómez; el comisario José Luis Torres; y el comandante de la Guardia Civil José María Jiménez.
ACAIP no acude al acto para apoyar a un compañero
ACAIP no acudió ayer al acto como medida de protesta tras ser expedientado un trabajador de la prisión, que además está afiliado al sindicato. “Han expedientado a un compañero por una tontería, y están pidiendo una falta muy grave que le puede acarrear de tres a seis años de suspensión de empleo y sueldo”, explicó Guillermo González, responsable del sindicato en Ceuta. La falta fue marcharse de vacaciones horas antes de lo acordado.
Los otros motivos que motivaron a nivel nacional la ausencia del sindicato es el conflicto presentado por la reducción de la oferta de empleo, la modificación de condiciones de trabajo, reducción del sueldo y congelación.