Hace más de dos años que la sección sindical de la Policía Local de UGT viene reclamando la reforma y ampliación del gimnasio ubicado en las dependencias policiales, y el compromiso arrancado al anterior consejero de Gobernación, Manuel Coronado, y que heredaba su sucesor José Antonio Rodríguez, de poner a punto estas instalaciones no ha visto aún la luz.
El incremento de la plantilla de la Policía Local hace necesario un aumento de las instalaciones deportivas, pero lo más grave radica en las condiciones en que se encuentra el gimnasio. “Sólo hay dos duchas que no funcionan, los platos, además, están oxidados. Los vestuarios están inutilizables y el agua se filtra al Parque Móvil, por lo que tienen que cortarla”. Es la enumeración de deficiencias que realiza el delegado de la Junta de Personal de UGT y responsable de Policía Local, Rafael Tineo, quien, al margen de las condiciones en que se encuentran estas dependencias, apunta también a la carencia de medidas higiénicas en las propias duchas. “Aunque se limpia, “se puede coger cualquier tipo de infección porque hay cortinas de plástico que acumulan muchas bacterias”, explica.
Aunque Tineo apunta a que el proyecto se encontraba presupuestado y redactado desde hace dos años, a día de hoy continúa tal y como lo dejó el anterior consejero del área de Gobernación. “Estamos cansados de las promesas del consejero y vamos a tener que adoptar otras medidas porque por la vía del diálogo nos deja tal y como estábamos”.
De nuevo el compromiso de llevar a cabo la ejecución de la obra volvió a planear hace algo más de un año, aunque nuevamente quedó en el aire. Un intento posterior, hace aproximadamente siete meses obtuvo el mismo resultado, tal y como explica el representante sindical. “Nos dijeron que la partida estaba liberada y que las obras iban a empezar de manera inminente, en uno quince días, pero todo sigue igual”.
Reparación
Siete meses después de la última intención de acometer el proyecto, Tineo se muestra comprensivo ante la ejecución total del proyecto. “Si no lo pueden ampliar por cuestiones económicas, al menos que lo arreglen. Entendemos que estamos en un momento de crisis, pero la partida ya estaba presupuestada. Es un dinero que le corresponde a la Policía Local y se tiene que gastar a lo que estaba destinado, a no ser que lo hayan invertido en otras cuestiones”, concluye.