Los delitos por agresiones sexuales crecieron un 18,1% en España en 2018 respecto a un año antes. Un ejercicio en el que 47 mujeres fueron asesinadas por violencia de género, y que este 2019 ya se ha llevado a nueve, que han perdido la vida a manos de sus parejas o ex parejas hasta el 15 de febrero. En un futuro próximo, este tipo de víctimas estarán en manos de los alumnos que se están formando en el instituto Abyla en el ciclo de Promoción en Igualdad, y que ahora están en posesión de un conocimiento ‘extra’ que se encontraba ausente en el programa didáctico: la defensa personal y, en concreto, la dirigida a las féminas.
“Observamos que el tema de la seguridad no se abordaba, que era un campo vacío y que para ellas, como futuras trabajadoras, era de importante conocimiento”, explicaba la tutora del ciclo, Laura Rojas. Estas nueve alumnas finalizarán sus estudios con los conocimientos básicos en esta materia gracias a un proyecto pionero en el ámbito educativo local, impulsado por Rojas y que ha contado con la colaboración de agentes del Cuerpo Nacional de Policía. Un curso enfocado a la defensa personal para mujeres que se ha extendido durante varios meses y ha dotado a las participantes de las técnicas básicas de autodefensa y protección.
“La base del curso ha sido dotarlas de confianza, reforzar su autoestima y enseñarlas a defenderse en una situación de riesgo que, desafortunadamente, cada vez son mayores”, apuntaba Rubén, uno de los agentes instructores.
La autoestima constituye la base para una buena defensa, ya que estas medidas de autoprotección son las que preceden al ataque y evitan muchas veces la agresión en sí. “La defensa personal no implica solo poder reducir a una persona con un golpe, son todas las técnicas que se resumen en poder salir de una situación adversa con unos mínimos conocimientos”, aclaraba Marco, otro de los agentes instructores.
Desde el punto de vista profesional de los agentes existen una serie de recomendaciones básicas que pueden evitar problemas, “como rehuir el tránsito por núcleos conocidos de determinada delincuencia; pararse y voltearse para comprobar si viene alguien, o utilizar los escaparates, porque nuestra vista es periférica y vemos más de lo que creemos”.
Las alumnas demostraron ayer las técnicas aprendidas durante la clausura del curso que, en vista del éxito que ha generado, ya se está barajando la posibilidad de volver a repetirlo el próximo año.
Esta fue la actividad que arrancó el cargado programa que ha organizado el centro educativo con motivo del Día de la Mujer y que se extenderá hasta el próximo viernes.