Hace tres semanas se encontraba en una piscina de las dependencias del Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos (CECAM). Era una de las dos tortugas verdes rescatadas de las redes de la almadraba, un insólito caso al tratarse de una especie nada habitual en aguas ceutíes.
Además, quiso la casualidad, o tal vez, un cambio en las rutas migratorias de esta especie, que fueran dos, un macho y una hembra, los ejemplares recuperados en menos de 15 días. Este hecho llamó la atención de los investigadores del Oceanogràfic de Valencia que se trasladaron hasta la ciudad para instalar sendos localizadores vía satélite a los animales a fin de hacer un seguimiento y recopilar así información relativa a su hábitat de vida o sus futuros pasos.
La hembra podría desovar en algún punto de la costa mediterránea
A los pocos días de su suelta el rastreo constató que uno de los ejemplares, concretamente la hembra, pasó cerca de las costas de Melilla, y poco después el seguimiento indicaba que ya había pasado Argelia y continuaba su camino por el mar Mediterráneo.
La ruta elegida por la tortuga podría arrojar luz a los investigadores sobre la procedencia de la especie, bien de la zona mediterránea o del Pacífico, hábitats naturales de la tortuga verde. Por otra parte se da la circunstancia que la tortuga había sido fecundado, por lo que en cualquier momento podría tocar tierra para desovar.
La especie se encuentra en peligro de extinción y aunque está protegida en gran parte del mundo, la caza de estos ejemplares para comercializar con su carne, la recolección de sus huevos, las redes de pesca donde quedan atrapadas y mueren ahogadas o la contaminación marina siguen siendo los grandes enemigos de su subsistencia.
El CECAM rescata una tortuga verde, especie inédita en el Estrecho