Punto y final, en aguas ceutíes, al conflicto del buque ruso fondeado en aguas de la bahía norte desde hace dos meses y medio. El remolcador Luz de Mar ha comenzado a arrastrar al mercante este martes con Motril como destino.
Capitanía Marítima, por resolución de la Dirección General de la Marina Mercante, ha decidido remolcar al buque hasta este puerto, en Granada, ante el incumplimiento de compromisos por parte de los armadores.
Por motivos de seguridad, la administración marítima ha decido darle refugio en el puerto de Motril, donde quedará atracado. Con tan solo 6 toneladas de fuel, temían que un temporal pudiese arrastrar al barco y chocar contra las piedras ante la insuficiencia de combustible para navegar.