My way, como decía y cantaba Frank Sinatra, mi cantante preferido. Se nos ha ido Jesús Hermida, “ a su manera”, como él también decía (era un programa televisivo que él dirigió durante un tiempo). Nos ha dejado uno de los mejores profesionales de la T.V., quien desde los años 60 marcó una época, hasta nuestros días, aunque últimamente no se prodigaba mucho. Tenía 77 años.
La última entrevista concedida fue al Rey Juan Carlos I en el año 2013, antes de que éste abdicara en su hijo. Buena y entrañable amistad entre ellos. Desde que vi al señor Hermida por primera en T.V., siendo yo estudiante, ya me di cuenta de que apuntaba maneras. A mí ya me gustaba escribir y veía en él, a alguien diferente, “raro” para algunas personas, pero a mí me encantaba. La “rareza”, es genialidad. Yo lo veía y escuchaba siempre que podía, sin llegar a pensar siquiera lo que el periodismo me iba a gustar años más tarde. Estudié Magisterio. Muchos han sido los profesionales, los periodistas que han dejado huella (hablo de España, claro). Recuerdo a Tola, diferente, carismático y muy comunicativo. Pero Jesús Hermida tenía “algo especial”. Era un auténtico swhoman. Empezó su trayectoria en nuestro país, la más prolífica la tendría en Antena 3 T.V., cuando hace 25 años, ésta empezó su andadura. Entre tanto, había otros canales televisivos y él siempre aparecía en algún que otro programa, con su peculiarm personalidad bien por las mañanas, e incluso en “telediarios” por las noches. Me seguía gustando. Su manera de hablar, de comunicar, de moverse por el plató con una mano en el bolsillomde su chaqueta, por su manera de sentarse y cruzar las piernas, dando a veces la impresión de que se iba a caer; y ese flequillo, siempre cayéndole sobre su frente hacia un lado; ese movimiento corporal tan característico suyo. En fin, único. Nunca olvidaré aquel famoso día, aquella famosa noche del 20 de Julio de 1969, cuando , y viviendo y trabajando en Nueva York (New York, New York!), retransmitió en directo la llegada por primera vez del hombre a la Luna. Armstrong, Aldrin y Collins sería los pioneros. Eran las 22:30 de la noche. Por aquel entonces, mi padre aún vivía y mi abuela materna también (con nosotros) y mi hermano y yo éramos estudiantes. Lo que se iba a producir aquella noche era algo histórico, trascendente para el mundo entero. Mi hermano se marchó a casa de un amigo a ver la retransmisión. Yo, con mi familia, empezamos a ver una película, esperando el momento. Terminó la película, pero como ellos andaban cansados y ya era tarde, se marcharon a dormir. ¡Yo no podía hacerlo! Tenía que estar ante el televisor para “asistir” al evento espacial. Pusieron casi un par de películas más, pero la segunda la tuvieron que cortar, ¡ pues llegó el momento! Yo le había comunicado a mi familia, de que llegado éste, los despertaría para “vivir juntos” esta odisea en directo. 4 más o menos de la madrugada en España. “¡Corred, corred,levantaos!”. Y allí estábamos los cuatro, sentados frente al televisor en blanco y negro, atentos al crucial momento. Yo tenía 17 años. Se escuchó la voz de Jesús Hermida, contento, alterado, feliz. Su voz resonaba con tal potencia y euforia, que me parecía estar a su lado. “Un pequeño paso para el hombre, un salto importante para la Humanidad”, retransmitía Neil Armstrong (recientemente fallecido); fue el 1º astronauta enn pisar la Luna, bajándose del módulo lunar y a continuacion ,junto a Aldrin (¿me equivoco?) colocaron una bandera americana sobre el terreno y rezaron. Mientras tanto, Collins quedó orbitando. Comprobar a través de las televisiones del mundo, la ingravidez que allí se respiraba, era un espectáculo único. Se les veía felices y Jesús Hermida estaba pletórico de poder comunicarnos, contarnos lo que estaba sucediendo. Gracias, por habernos hecho partícipe de aquel episodio tan importante para la Astronáutica. Nunca lo he olvidado. A mis muchas promociones de estudiantes les he contado este hecho, e incluso lo llegábamos a escenificar en la clase, resultando muy divertido y entrañable. Mi familia y yo disfrutamos mucho, aplaudiendo cuando terminó la conexión. Ya que he hablado de alumnos, recuerdo una asignatura, en la que tocaba hablar sobre lozs “medios de comunicación”, en concreto, el Periodismo. Yo no les expliqué nada, fueron ellos mismos los que dieron la clase; yo era una alumna más; bueno, les daba alguna que otra pauta a seguir, pero ellos estaban acostumbrados a improvisar (yo les enseñé, era como un “psicodrama”). El día antes les comenté que vinieran al aula con cámaras de fotos (si tenían o sus padres se las dejaban). Algunos incluso hicieron fotos realmente ( yo también). Prepararon libretas de apuntes, bolígrafos, se colocaron gorras de aventureros como auténticos periodistas; eran chicos y chicas de 11-12 años. Se vistieron con pinta de reporteros, incluso una alumna hizo de linotipista. En fin, la clase se convirtió en un auténtico “lugar periodístico”, donde ellos se movían a sus anchas; las mesas llenas de periódicos con noticias actuales para comentar. Algunos marcharon a algunas clases, con permiso del profesor correspondiente para hacer alguna pequeña encuesta sobre algún tema. Lo más interesante de todo, es que yo, dos días antes había conseguido una figura decartón enorme,a tamaño natural, de Jesús Hermida en un video-club, ya que lo iban a tirar. Aparecí en el Colegio con él, bajo el brazo y como ocurre en tantos casos, se me miraba como “bicho raro” ( algunos padres, algunos alumnos –los míos no–-, vecinos). Mis compañeros ya me conocían. Esta figura de cartón, estuvo todo el curso en el aula. (Por las mañanas, cuando mis alumnos entraban en la clase decían:”Buenos días, Jesús”). Al final de curso, y en sorteo, se la llevó un alumno. Colocamos a Jesús en medio de la clase,de pie, entre dos mesas y los chicos se acercaban, “cámara en ristre”, le hacía fotos, le hablaban cual si fuera de verdad, le hacían preguntas y ellos escribían las respuestas imaginarias . De sobra sabían quién era este periodista, ya que yo les había hablado mucho de él, por aquello de la llegada del hombre a la Luna. Algunos, incluso llevaban grabadoras, de verdad, y yo, como partícipe, si hacían algunas preguntas, me colocaba detrás de la figura e intentaba contestarles con voz de hombre. Fue divertidísimo. Por supuesto, las fotos se las envié a Jesús Hermida en un sobre certificado a Antena 3, que espero recibiera. Estoy casi segura que fue así, aunque no esperaba que respondiera. No lo hice para eso, aunque me hubiese hecho ilusión.Espero que pasara un buen rato contemplándolas. Hoy, mis alumnos de aquella promoción cuando hayan visto y escuchado sobre el fallecimiento del periodista, a buen seguro habrán recordado aquellos momentos que vivimos durante más de una hor en el aula sin utilizar el libro de texto. Comprendieron perfectamente lo que es el Periodismo. Más de uno ya es periodista (en otra ocasión, le tocó el turno al aventurero Miguel de la Quadra Salcedo de todos conocido, “quien también estuvo con nosotros durante todo el curso”). Nieves Herrero, Consuelo Berlanga, Irma Soriano, las tres periodistas definidas como las chicas Hermida, se hicieron célebres gracias a él, ya que fue su mentor,consejero, maestro. Ha habido momentos a lo largo de muchos años, de complicidad y amistad entre ellos. Hoy lloran su ausencia. Supongo que Jesús reiría muchísimo a mandíbula batiente, cuando se viera imitado tantas veces por Josema Juste, excomponente del dúo cómico Martes y Trece. Eso espero. Lo más seguro es que fueran buenos amigos. Siempre recordaremos esta parodia. El estilo de Hermida era “americano”. Se le notaba. Su estancia en Nueva York le influyó. Importó a nuestro país un Periosimo diferente y original, por su forma de comunicar, que al menos a mí me cautivó. Digamos que se salía un poco de las normas establecidas, siempre respetuoso con sus compañeros; nos transmitió un estilo que nadie ha sabido imitar. Aunque el buennperiodista, el señor Carrascal, también español, famoso por sus corbatas, también marcó estilo, pero diferente. Ya jubilado vive a caballo entre Nueva York y España. Gran profesional. Jesús Hermida. Un buen hombre y hombre bueno para recordar como persona y profesional.¿Seguirá haciendo ésas sus típicas entrevistas por esos otros mundos paralelos? Forever, Jesús.