He considerado oportuno efectuar una valoración de nuestra convocatoria por la Paz Intercultural, del día 18 de septiembre. Quiero recalcar, ante todo, que se hizo esta concentración sin ningún interés político, y que fue un acto espontáneo y necesario para dar respuesta ante los informativos que nos bombardean continuamente en los medios de comunicación.
Y ante todo, una vez más, nuestra solidaridad con los cristianos iraquíes y cualquier ser humano perseguido.
Nos ha llenado de alegría saber que también los hermanos de Melilla convocaron otro acto similar el mismo día y a la misma hora. Para más adelante hay otra convocada en Valencia, y por lo visto esto ha comenzado a caminar por inercia, y los que ven en esto un acto político se equivocan de cabo a rabo. Sinceramente me ha sorprendido muy gratamente que todo el Grupo Popular hayan tenido el detalle de asistir a nuestra humilde convocatoria por la Paz, y me ha sorprendido enormemente que el PDSC, e IU, no solo no hayan asistido, sino que ni si quieran se hayan disculpado por la no asistencia, creo que son sorpresas que da la vida. Si todos somos musulmanes, cristianos, judíos, hindúes... tengo mucho que decir, si queréis puedo hablar de esto, inclusive con argumentos sólidos, desde el prisma yihadista.
Quiero agradecer desde esta página la atención del señor comisario, que se tomó las molestias de argumentarnos por qué no podría asistir. Y de paso agradecemos a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado su buen trabajo. Yo no me di cuenta de que estaban, presencia que hicieron a petición nuestro al delegado del Gobierno. Le agradecemos su interés por velar por la seguridad ciudadana, y no estábamos equivocados cuando solicitemos la presencia policial. Hubo uno, como de costumbre mandado por alguien, que al ver a la Policía a lo único que se limitó fue a insultarme y seguir su camino. Yo no lo oí, pero los nuestros sí.
Era lógico que nosotros pidiéramos seguridad al delegado del Gobierno: en la concentración del 25-J, un individuo intentó agredirme hasta tres veces. Nunca en mi vida hablé con él, con la excusa de que soy un traidor a los musulmanes siguió el individuo intentando agredirme. Como es lógico, si tú me quieres agredir yo tengo que informarme de quién es, y resulta que es un sujeto casado, sin trabajo, nunca ha trabajado, con hijos. ¿De qué vive? Se dedica a vender veneno a esos “musulmanes” que él defiende de mí. Yo seré un traidor de esos “musulmanes”, pero no soy tan hipócrita, y asesino indirecto, de vender veneno a sus “hermanos” musulmanes.
Dejemos estos asuntos, no sé ni siquiera por qué lo he mencionado, y nos estamos desvariando del tema principal. Como es lógico merece un agradecimiento especial nuestro vicario de Ceuta, Juan José Mateos. Ha conseguido que le tengamos un gran cariño, un hombre sencillo y comprometido con la sociedad. Una vez más a todos los presentes y ausentes muchísimas gracias.