Patio Castillo. En el número 9 de esta calle, con salida a Pasaje Recreo alto, se localiza este céntrico “barrio a unos cien metros de Real, 90 y a dos minutos de la plaza Azcárate, casas unifamiliares de una sola planta, peatonal y muy tranquilo. A priori, el patio Castillo podría parecer un barrio residencial en el que a cualquiera le gustaría vivir, pero la realidad es muy distinta: Patio Castillo es el barrio paria del centro de Ceuta.”
“Uno de los famosos patios caballas de tanta solera, integrado por un vecindario trabajadory limpio que lo tiene enjalbegado de cal blanca y adornado con cientos de macetas floridas, dandole una pincelada de cortijo andaluz” (Joaquin Amador, El Faro de Ceuta, 9/3/86)
En patio Castillo, viven más de medio centenar de familias, en una pequeña barriada escondida en una vaguada. La mayoría de estas familias, viven en una situación de ilegalidad. Construyeron sus casas de forma ilegal, si, pero ya hace varias décadas de ello. Ahora son ya un barrio más, pero aún no disfrutan de las mismas condiciones de calidad de vida, de sus vecinos de Real 90, por ejemplo, de quien les separa tan solo un descampado que hace las veces de aparcamiento y de frontera invisible (El Faro 23/3/09) Algunas de la barracas de este patio, eran propiedad del mismo Juan Castillo. En los años 60 la Iglesia Evangélica llegó a organizar algunas reuniones, según me informa José Bernardo, que anda metido en estos menesteres.
Francisca Mateo Molina, de Málaga, su casa, soltera. María Capacete León, Ronda (Málaga), viuda, cinco hijos. Isidoro Sanz Melendez, Badajoz, chófer, casado. Manuel Rodriguez Ruiz, Iznajar (Granada), chófer, casado, dos hijos. Antonio Ruiz Diaz, Motril (Granada), vendedor, casado. Remedios González Escodal, Torremolinos (Málaga), viuda. Consuelo Pérez Risar, El Burgo (Málaga), viuda, dos hijos, jornalero y militar. Germán Conco Campos, Torre del Mar (Málaga), pescador, casado, dos hijos. José Luis Rubio Morales, Algeciras (Cádiz), jornalero, casado. Francisco España Pérez, de Almarcha (Málaga) viudo, militar y sus hijos Antonio, Maria y José, nacidos en La Linea.
Además estas otras familias vivieron en el patio: Miguel, Francisca y Juana, de Ceuta. Francisca Jiménez Zolate, Algeciras (Cádiz), sirvienta, soltera. María Rosa Molino, Torrox (Málaga), vendedora, viuda. Francisca Caballero Villaba, Málaga, soltera. Isabel García Martín, Málaga, su casa, viuda, un hijo. Antonio Gonzalez Soria, Torremolinos (Málaga), pescador, casado, cinco hijos. Francisca Viso Jordan, San Roque (Cádiz), vendedora, viuda, un hijo. Amador Torres Ramadán, Córdoba, jornalero, casado. Inocencio García Marina, Jerez de la Frontera (Cádiz), Patrono, casado, un hijo. Salvador Cervantes Núñez, Fuengirola (Málaga), pescador, casado, cuatro hijos.
La mayoría de estas barracas eran clandestinas, como figura en el Padrón de Barracas de 24/04/1940, la propiedad de las mismas, repartidas entre las familias Las Heras y Castillo.
Otros vecinos de este populoso patio, fueron: José Lopez Torres, de Sierra de Yeguas (Málaga), propietario de dos barcas con las que pescaba, casado con María Mena González, de Jimena (Cádiz) y sus 10 hijos: sólo le viven, Miguel, José Luis, Pepi, Loli e Inmaculada. A los 8 años, Fracisco Javier resultó muerto por atropello de coche. Francisco Sarmiento Medina, casado, hijo de Vicente y de Pilar, natural de Motril (Granada), jornalero, así como Miguel Parra Vega, hijo de Francisco y Mercedes. Natural de La Linea de la Concepción (Cádiz), casado y jornalero de profesión.
“Parece ser que cerca de la salida al Pasaje Recreo, había un “Café Cantante”, donde cantaba Rafael, a quien llamaban “el niño de la Mezquita”. Una tal Manuela, que se le quemó la casa. Y María “la morcillera” que vendía morcilla de las que se hacían con sangre. Era este un patio donde habitaban muchos vecinos de raza gitana”. (Angelita Gomez-Llano).
“Juan Ramos Fernández, casado con Antonia Calvente Andrade, vivió en este patio, donde nacieron todos sus hijos: Juan (turismo), Antonio, que nació en Brasil, Francisco (policía), Fernando (electricista), Mari Carmen y Luisa. De muy pequeño, sus padres cambiaron de residencia a Castillejos (Marruecos), pues el cabeza de familia, trabajaba con su padre haciendo carbón. Más tarde se dedicaron a la exportación de dicho mineral, a España, fletando para ello barcos con destino a la península. Aquí vivió una buena amiga de Antonio Breviatti, a la que llamaban “Yeye”.
Otro vecino de este patio, lo he localizado en la provincia de Málaga, concretamente en Torremolinos, donde reside desde su marcha de Ceuta. Ahora con 87 años me relata lo siguiente: “Ginés Gonzalez Martín, “el morcilla” (le gustaba mucho este embutido), de soltero pescador, se casó con Concepción Espino Maldonado, un 2 de Enero de 1960, en la Iglesia del Valle, ceremonia que ofreció el padre cura D. Antonio. Su padre, Antonio González Soria, era natural de La Carihuela, conocídísima playa turística, que antes fue de pescadores, él mismo Ginés, nació en esta humilde barriada de Torremolinos, su madre Luisa Martín Campoy, trabajó en el Patio Don Juan, limpiando, tiene una hija llamada María Luisa Gonzalez Espino. Además vivieron sus hermanos: Juan (fallecido) Antonio, que vive ahora en Barcelona, José que vive en Vitoria y Salvador, que reside en Castellon de la Plana. De este patio recuerda a vecinos tales como: Nicolás, Antonia (que era su comadre), su marido José Portillo, Manuel “el gitano”, “El ChichI”, Nicolás “el postilloso” (tenía muchas postillas en las piernas), Antonia “la rubia” y Paquita Caballero. Igualmente vivió en el Patio Centenero, pero por poco tiempo, pues había muchas barracas y le gustaba más este otro, del que cuenta que poseía casas en planta baja y en el primer piso.
Contacto con Ana García Calderón, cuñada de Ginés González, también natural de La Carihuela-Torremolinos (Málaga), así como su marido Antonio, hermano de Ginés, pescador también. Estos se casaron en la Iglesia de África, un 1 de febrero del año 1960. Tuvieron cuatro hijos: Antonio, que falleció a los 7 meses, Luisa, fallecida igualmente joven pero ya en Cataluña, dejando un hijo, Juan Antonio y Manolo.(Ana García).
“Investigación de posibles responsabilidades de las obras de la Huerta del Molino, por la inundaciones que sufrió durante las pasadas lluvias torrenciales” (SUR 8/10). Algunas de las barracas o chabolas de este patio, eran propiedad del mimo Juan Castillo. Don Antonio, el maestro, cuyos hijos trabajan en Intendencia y otro en Automovilismo fueron vecinos del patio.
Juan Antonio Román, aunque nacido en el Príncipe, se crió en este patio, de donde son su familia materna. Dice ser un patio de gente buena y sencilla. Sus padres tuvieron una tienda que se le conocía como “la tienda de Pura” (la antigua dueña), después conocida como “la de Angelita” por el nombre de su madre. Guarda muy buenos recuerdos de las hogueras de San Juan y los saltos que daban los chavales por encima del fuego. Recuerda que, hasta hace poco se ha mantenido un equipo de fútbol Sala, llamada Castillo. Resalta Juan Antonio, que una de las peculiaridades de este patio era la buena convivencia no sólo entre árabes y españoles, sino entre gitanos y payos. La familia San Vicente y “la Tata” vivieron en este patio. Él era conocido por “el cabeza”, trabajó en Baeza; justo al lado vivía Ana “la del grifo”, apodo que le venía por estar su vivienda justo al lado del grifo comunitario.
Vecinos de esta patio fueron Salvador Viso Rodriguez y Andrea Ragel Tellez, tíos de José Muñoz Ragel, (vecinos del Patio Reyes o Lara) con sus dos hijos Miguel Antonio y Joaquin.Manuel García Guerrero, de Estepona (Málaga), hortelano, casado con Juan Córdoba, que trabajó en el cuerpo de la Policia Armada, y sus hijos: Paco, Antonio, Pepe, Maruja y Carmen García Córdoba.
Francisco Soler Villar, Manuel Peinado Rodriguez, Francisca Portillo Gonzalez, Julian Mengibar Gonzalez y María Ferrón Peinado, aparecen en el censo de 1936.