Ya conocemos los presupuestos de la ciudad para el ejercicio de 2011. Unos presupuestos demasiados continuistas y sin ninguna propuesta de solución ante la situación económica y de empleo que atraviesa la ciudad, compartiendo con nuestra ciudad hermana la cabeza de serie en los números del paro y siendo una de las ciudades más endeudadas del país.
Este 2010 no ha sido un año bueno para el ejecutivo de Vivas, con salidas de tonos de sus discípulos y con más de una polémica en el seno del Gobierno. El señor Vivas ha escuchado como su Gobierno era catalogado de oportunista, de tener actitud seudomafiosa y demás términos que no han sentado muy bien al ejecutivo, y ésta, la de los presupuestos, era la oportunidad de oro para que el Presidente se reconciliara con la opinión pública presentando un plan austero, responsable y con alternativas para mejorar la maltrecha economía de la ciudad.
Una vez más el Gobierno de Vivas no sabe estar a la altura de las circunstancias. Nadie tenía dudas sobre la responsabilidad que había que adoptar a la hora de elaborar los presupuestos en recortar gastos debido a la situación que atravesamos. Pero tampoco había duda de donde no debían producirse esos recortes o donde menos debía notarse la disminución del gasto. El gobierno del Partido Popular no lo ha tenido tan claro y se ha dedicado a comprimir los presupuestos de 2010 sin pararse a contemplar que las partidas más perjudicadas no son las idóneas.
No han tenido miramientos en realizar un recorte del 9,23 % en Sanidad y del 8,66 en Asuntos Sociales, demostrando que en tiempos difíciles el PP se ceba con los que peor lo están pasando. No son los únicos recortes inapropiados a mi parecer, por el Gobierno Local, pues también han recortado en un 7,94 la partida en educación, cultura y mujer respecto a las de este año. Pero lo que más me ha indignado de estos últimos presupuestos es el recorte en los planes y programas en la política de juventud, un nuevo varapalo para los y las jóvenes de nuestra ciudad, uno de tantos en los últimos tiempos.
Todos estos recortes no hacen sino dejar en evidencia la política del Gobierno y reflejar que la actividad del ejecutivo va dirigiéndose a pasos agigantados hacia la derecha más rancia, acorde a su partido a nivel nacional y a su líder Mariano Rajoy, que ya ha dado unas pinceladas de la que será su propuesta económica para las próximas elecciones generales.