Tarde caótica en la frontera del Tarajal. Por razones que no concretaron ayer, las Fuerzas de Seguridad del Estado mantuvieron a los porteadores en el cruce del Príncipe Felipe y en la conocida como pista del Jato, sobre la N-352.
La acumulación de camalos fue de tal magnitud ayer que acabó paralizando el tráfico rodado en la carretera nacional.
Vecinos de las barriadas colindantes a bordo de sus turismos particulares; vehículos pesados de transporte de mercancías a los polígonos del Tarajal; turistas marroquíes y los conocidos como coches-almacén quedaron atrapados en el último tramo en dirección a la frontera. La circulación quedó ralentizada durante gran parte de la tarde.
De nuevo, escenas de tensión que pueden acabar en cualquier momento en una desgracia. Los porteadores ocuparon la calzada a la espera de que la Guardia Civil les autorizase el paso desbordando el acerado de la ‘carretera nueva’ y la subida al Príncipe.
A diferencia del filtro utilizado por la tarde, la Guardia Civil contuvo a los porteadores en la playa del Tarajal por la mañana, como hace desde las avalanchas en plena frontera de diciembre de 2015.