Fue sorprendida en el Puerto con 150 cápsulas de hachís adosadas al cuerpo.
Una mujer marroquí residente en Málaga, de iniciales B.B., se declaró culpable ayer ante la juez de lo Penal 1 de nuestra ciudad por un delito contra la salud pública, es decir, tráfico de drogas. La pena, previo acuerdo de conformidad alcanzado con la Fiscalía, incluye la prohibición de venir a Ceuta o residir en la ciudad por un periodo de dos años. Una pena que viene a dejar en suspenso por el mismo periodo de tiempo de la condena de un año y cuatro meses de prisión a la que fue condenada por el delito de tráfico de drogas y la multa de 1.528 euros.
La mujer fue sorprendida el pasado 16 de mayo en el puerto de nuestra ciudad con 150 cápsulas de hachís que llevaba adosadas al cuerpo. La mujer se encontraba en el control de embarque de vehículos con destino a Algeciras, cuando su actitud levantó las sospechas de los agentes de la Benemérita.
En el preceptivo registro, los guardias hallaron la droga que la conductora llevaba pegada al cuerpo. En total portaba casi un kilo y medio de este estupefaciente con un valor en el mercado ilícito de casi 2.300 euros.
En el mismo momento de la detención, la mujer reconoció que la droga era suya y, por ello, en la vista judicial de ayer se le aplicó el atenuante de colaboración con la justicia, lo que redujo la pena inicial solicitada por la Fiscalía a un año y cuatro meses de prisión y una multa rebajada también de 1.528 euros.
Dado que la condenada reside en la ciudad de Málaga, se le suspendió la condena de cárcel y se cambió la expulsión del territorio nacional por la prohibición de viajar a Ceuta por un periodo de dos años.