La FSP-UGT ha denunciado la “alarma” generada por la retirada de policías locales del centro ‘La Esperanza’, en Hadú, para destinarlos a nuevas funciones tras la creación de una unidad, el GRUMA, para perseguir el incumplimiento de las ordenanzas. UGT critica que esta medida genera “inquietud” entre los trabajadores del centro así como en vecinos de las barriadas cercanas.
“Resulta intolerable que un servicio que lleva funcionando más de doce años perfectamente con unos excelentes resultados, que da tranquilidad al personal del centro en un trabajo tan delicado como es el de menores, que da tranquilidad a los vecinos, e incluso da tranquilidad a los propios menores, se pretenda desmontar para no sabemos qué fines. A ello debemos añadir que, efectivamente, hay escasez de miembros de la Policía Local porque el Gobierno del Presidente Vivas en lugar de reponer las bajas por jubilación se ha gastado el presupuesto en el nombramiento masivo de asesores y demás personal de confianza, perfectamente prescindible”, critica el sindicato en una nota de prensa en la que además advierte de los problemas que había antes de que la Policía fuera destinada al lugar.
“El Gobierno pretende desmontar este servicio, lo que va a provocar que volvamos a tiempos pasados”, añaden.