El nuevo comandante general jura el cargo en el Salón del Trono y se presenta ante las unidades en García Aldave con rotundidad: “Tenemos que mejorar el nivel”
Porte sereno, voz suave, verbo calmado aunque mensaje rotundo, mirada serena. De tal manera, cuarenta minutos sobre las diez de la mañana, hacía entrada al Salón del Trono de la Comandancia General, y juraba su cargo acto seguido, Francisco Javier Sancho Sifre, nuevo comandante general de Ceuta. “Juro cumplir fielmente las obligaciones del cargo de Comandante General de Ceuta con lealtad al Rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado”, dijo, justo antes de proceder a la firma de la cédula de la toma de posesión ante la presencia de autoridades civiles y castrenses.
Era este, por tanto, el comienzo de la ‘Era Sancho’ al frente de una de las plazas castrenses de mayor importancia, y de más solera, de todas cuanto componen el Ejército español, como así pudo comprobar, a buen seguro, minutos después en el acuartelamiento García Aldave, cuna de la Legión y enclave que concentra el aura especial y la idiosincrasia de ‘lo militar’ en Ceuta. Allí, en la Posición A, Sancho Sifre recibió el mando en un acto que estuvo presidido, como el anterior, por el jefe de la Fuerza Terrestre (FUTER), el teniente general Francisco Javier Valera Salas.
“Tomo el mando de esta Comandancia General continuando la senda del general Sanz Román, al que agradezco todas sus atenciones y consejos”, señaló en la alocución que pronunció en García Aldave, ante las unidades desplegadas, “no puedo ocultar el enorme orgullo que siento al tomar el relevo de aquellos que me han precedido en este cargo y la responsabilidad que supone intentar seguir la línea que marcaron, con la esperanza de estar a su altura”, dijo, con humildad.
“Asumir el mando de la Comandancia General de Ceuta, constituida por un conjunto de unidades que aúnan tradición, antigüedad y algunos de los historiales más condecorados del Ejército, junto a los materiales y medios más modernos, supone un enorme privilegio, una gran satisfacción personal, al ver culminadas todas mis expectativas y una gran responsabilidad”, valoró. “Es un reto profesional que acepto con absoluta tranquilidad porque sé que ahí, delante tengo a excelentes profesionales”, ensalzó para añadir que “lo fundamental del valor de una unidad no está en lo sofisticado de su material, ni en la excelente imagen que transmite la vistosidad de su presencia y uniformes, sino en la calidad humana de sus componentes y me consta que las unidades de la Comgeceu disponen de militares que cuentan con un enorme prestigio y que han hecho de la vida militar su religión”.
En este punto del discurso, Sancho marcó la hoja de ruta, si bien indicó que aún debe conocer en profundidad cada unidad: “Nuestra misión principal no es otra que la defensa del territorio nacional manteniendo una presencia de unidades con las que contribuimos de modo muy directo a las líneas de acción estratégicas de prevención, disuasión y respuesta que marca nuestra directiva de defensa nacional. El hecho de que estemos separados de la península, nos obliga a mantener un alto grado de operatividad y disponibilidad de todas nuestras unidades”. “Por tanto, el cometido más importante en el que tenemos que centrarnos, no es otro que el de mejorar nuestro nivel de preparación, basada en una exigente instrucción y adiestramiento, tanto con carácter individual como colectivo. Esa es nuestra verdadera razón de ser. Debemos estar en todo momento en condiciones de responder a las misiones que nuestro ejército nos asigne en beneficio de España”, aseveró, rotundo e implacable, antes de que se realizara el hermoso y tradicional homenaje a los que dieron su vida por España; se procediera a la retirada del estandarte; y a la dislocación de las unidades para un desfile con sabor a bienvenida. A bienvenida de la ‘Era Sancho’.
“Seguro que Sancho es un gran soldado español”
Vivas deseó al nuevo comandante general que "tenga éxito en su tarea" y recordó que Ciudad y Comgeceu "colaboramos en muchos ámbitos en pos del interés general". El presidente añadió que "Ceuta es castrense, el Ejército forma parte de nuestras esencias: lo dicen la historia, los monumentos y el corazón caballa. Muchas personas han conocido y querido esta tierra a través del Ejército. El Ejército es un pilar fundamental desde el punto de vista cultural y económico de Ceuta".
Por último, indicó que "el comandante general viene precedido de una hoja de servicio brillante y estoy convencido que, como los anteriores, será un ejemplo de dedicación, patriotismo, capacidad de trabajo y sacrificio, que son los rasgos que caracterizan al soldado español".