Agentes de la Policía Judicial de la Guardia Civil han decomisado más de 1.500 kilos de hachís y detenido al menos a dos personas en el marco de una operación abierta que lleva varios meses en marcha y con la que se persigue esclarecer el tráfico de drogas en grandes cantidades hacia la península.
Tal y como ha podido conocer El Faro, las investigaciones que desde hace al menos seis meses se estaban llevando a cabo dieron con la aprehensión, el pasado marzo, de más de 1.500 kilos de hachís. El cargamento estaba distribuido y oculto dentro de una batea y su entrada en la península fue abortada antes del embarque. El decomiso de la droga fue clave para seguir tirando de la línea de investigación hasta que ayer se procedió a la detención de dos hombres presuntamente relacionados con el movimiento de esta mercancía. Ambos permanecían en la Comandancia de la Guardia Civil contando con asistencia letrada y su detención se apurará hasta su puesta a disposición del juzgado que lleva este asunto. La operación continúa abierta así que no se descarta que pueda haber más arrestos en las próximas horas. Pocos son los datos que se han conocido en torno a este operativo, aunque se ha podido conocer que se ha intervenido sobre un almacén ubicado en la zona Almadraba-Tarajal así como que se han extendido las investigaciones sobre quienes podrían estar sirviendo de tapadera idónea para el embarque de la droga sin llamar la atención de las fuerzas de seguridad. Desde hace tiempo se está trabajando en la localización de almacenes-zulo que sirven para el depósito de la droga que, en pequeñas cantidades, entra en Ceuta por el paso fronterizo del Tarajal o por mar. De esos zulos parten los vehículos cargados o los camiones con dobles fondos habilitados para superar los controles.